Las mujeres adultas prefieren no festejar el 10 de mayo porque incrementa su carga doméstica al recibir de regalo planchas, licuadoras, olla express, lavadoras u otros enseres, reveló una encuesta de la organización civil Asociación de Servicios Integrales por la Equidad en la Sociedad AC (ASIES)
La encuesta fue aplicada a mil 200 personas: 600 mujeres y 600 hombres de entre 18 y 65 años de edad, tanto del Distrito Federal como de municipios del Estado de México con un nivel de escolaridad promedio de preparatoria.
El 94 por ciento de las y los entrevistados consideró que aún en el 10 de mayo, las mujeres son violentadas por situaciones tan simples como el no saber con quién acudir sí con la madre del esposo o la de ella y, sobre el costo de los regalos.
Además se evidenció que el esposo festeja primero a su madre y después a su pareja; existen además diferencias notables en cuanto al costo de los regalos que él otorga a cada una de ellas.
El sondeo también demostró que la responsabilidad de la educación de las y los hijos continúa recayendo en la mujer: el 63 por ciento de las y los entrevistados respondió que la tarea de educar es responsabilidad de ella; un 34 por ciento consideró que ambos padres deben compartir ese trabajo.
Sobre la figura de la «madre buena», el 97 por ciento respondió que sí se puede clasificar a las mujeres en ese rango, aunque un 98 por ciento dijo haber sufrido algún tipo de maltrato, bajo el argumento de que «era para educarlo, porque se portó mal o para corregirlo».
También se descubrió que entre las mujeres más jóvenes la maternidad no es una prioridad, en tanto que a la mujer como pareja y madre se le desestima.
2004/LGL/GV/SM
