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Inequidad en medios durante coberturas de campañas

Por Cirenia Celestino Ortega
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Pese a que en el pasado proceso electoral se logró la paridad política, en los medios de comunicación prevaleció la idea de que el poder es masculino y que las mujeres están negadas para ejercerlo, que la presencia de las candidatas generaría conflictos y sería poco beneficiosa a la sociedad y a la vida política del país, reveló el Observatorio de medios sobre la participación política de las mujeres “Sexismo en los medios es violencia política”  realizado por Comunicación e Información de la Mujer AC (CIMAC).

Presentado la tarde de ayer en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, el Observatorio, que analizó la cobertura de la participación política de las mujeres durante los meses de marzo a julio (desde el inicio de las campañas y una semana después del proceso electoral) enfatizó que ésta fue desigual en tiempos, espacios y ángulos para candidatas y candidatos.

Tras el análisis de  un mil 832 textos periodísticos de los seis medios de comunicación, impresos y digitales más leídos en el país y los 12 de mayor circulación en Nuevo León, Hidalgo y Chiapas, el Observatorio enfatizó también respecto a la cobertura, que las periodistas que cubren participación política de las mujeres publican menos que sus compañeros varones.

De acuerdo con el Observatorio, el sexismo se expresó en el uso constante del lenguaje masculino; la invisibilización de las candidatas; referirlas a partir de su relación de parentesco eliminando sus acciones, proyectos y logros personales; la reproducción de imágenes o fotografías que hacen de la participación de las mujeres una burla.

La utilización de las mujeres en el discurso electoral sin profundizar ni hacerlas partes de la política integral y reproducir el discurso estereotipado de las y los candidatos; la presentación de las candidatas como subordinadas a los hombres de su familia o del partido; o a partir de su apariencia física o forma de vestir; naturalización de características estereotipadas como la maternidad o la envidia como propias de las mujeres, fueron otras formas de sexismo en las coberturas.

Durante la presentación, la periodista y coordinadora del Observatorio estatal y profesora de la Universidad Autónoma de Nuevo León, Daniela Mendoza Luna, lamentó que no esté reconocida la violencia política contra las mujeres en el estado.

En el caso de Nuevo León, aunque los medios cubrieron más que en otros estados a las políticas, los medios no profundizaron en sus propuestas.

En los últimos 15 años en el mundo la presencia de las mujeres políticas como protagonistas de las noticias se incrementó en un punto porcentual, de 17 a 18 por ciento. En el caso mexicano, el Proyecto Mundial de Monitoreo de Medios (GMMP) señaló que en cinco años se apreció un avance de más del doble en la presencia de las mujeres como funcionarias públicas (de 9 a 19 por ciento), aunque todavía son minoría.

Mendoza Luna destacó que a pesar de la inmediatez que exige el periodismo y la precariedad laboral, es importante que las y los periodistas incorporen una ética basada en la igualdad que equilibre voces de mujeres y hombres por igual.

La Doctora e integrante del Cuerpo Académico Ciudadanía, Comunicación y Grupos Vulnerables de la Facultad de la Ciencias de la Comunicación de la UANL, Margarita Emilia González Treviño, señaló que a pesar de tener legislaturas estatales paritarias, en el poder Ejecutivo estatal y municipal las mujeres siguen alejadas de la toma de decisiones en las gubernaturas y las alcaldías.

De acuerdo con la Ley Modelo Interamericana sobre Violencia Política contra las Mujeres (2017) la violencia política contra las mujeres puede ejercerse a través de la divulgación de imágenes, mensajes o revelen información de las mujeres en ejercicio de sus derechos políticos, por cualquier medio físico o virtual que, basadas en estereotipos de género transmitan y/o reproduzcan relaciones de dominación, desigualdad y discriminación contra las mujeres, con el objetivo de menoscabar su imagen pública y/o limitar sus derechos políticos. Puede suceder en cualquier ámbito, incluso en los medios de comunicación y las redes sociales.

La representación mediática sexista en el tratamiento y desigual en el espacio destinado a candidatas y candidatos atenta contra el principio de “igualdad de condiciones” establecido desde 1946 cuando se ganó el derecho a votar y ser electas, por lo que CIMAC hizo un llamado a las jefaturas de información y a periodistas a reconocer la participación política de las mujeres y a las empresas mediáticas a transformar la práctica periodística desde la ética basada en la promoción de la igualdad, mientras que al Estado mexicano lo llamó a cumplir con su mandato de vigilar que los contenidos mediáticos no promuevan la violencia contra las mujeres.

18/CCO/LGL

 

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