Con una propuesta dura por la paridad política de las mujeres en la región, avalada por la presidenta chilena Michelle Bachelet, el presidente ecuatoriano Rafael Correa y la vicepresidenta española María Teresa Fernández de la Vega, inició en la capital ecuatoriana la X Conferencia Regional de la Mujer de América Latina y el Caribe.
Esta edición de la Conferencia, organizada por la Comisión Económica para América Latina (Cepal) en un hotel capitalino, con 600 delegadas, es la mayor en su historia y tiene también como prioridad discutir otros aportes de las mujeres como el trabajo doméstico.
La vicepresidenta española abrió su discurso desde una convicción «democrática y feminista», de que las sociedades del futuro son imposibles de imaginar sin la plena participación de las mujeres.
«Se trata de decidir cómo compartir entre hombres y mujeres las responsabilidades domésticas y del cuidado, hoy casi en exclusiva en manos de las mujeres, y cómo compartir las responsabilidades públicas y políticas, hoy casi en exclusiva en manos de los hombres».
Sobre la paridad sostuvo que «el planteamiento liberal, a mi juicio interesado de la igualdad de oportunidades, yerra en la valoración de la extensión e importancia de la discriminación que padecen las mujeres en el acceso a los cargos públicos».
Asimismo, anunció una iniciativa conjunta con la presidenta Michelle Bachelet para impulsar una agenda de equidad en la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno que se realizará del 8 al 10 de noviembre próximo en Santiago de Chile.
La ministra de Relaciones Exteriores, Comercio e Integración, María Fernanda Garcés, aseguró que «el papel protagónico en el horizonte nuevo y esperanzador del continente demanda resignificación del concepto de equidad. No se trata de una dádiva de la sociedad masculina».
Subrayó «no estamos mendigando cuotas del poder patriarcal o seudo tolerante. Estamos exigiendo el reconocimiento al esfuerzo, al talento al valor y al compromiso con las causas justas de la sociedad», al recalcar la exigencia de cumplimiento de cuotas en la próxima Asamblea Nacional Constituyente.
BREVE DIAGNÓSTICO
José Luis Machinea, secretario de la Cepal, luego de celebrar la presencia de Michelle Bachelet y de María Teresa Fernández, consideró «un cambio cultural de gran magnitud» la mayor presencia femenina en la política.
Culpó a las elites gobernantes por no poner fin a la exclusión de las mujeres y detalló que ellas se incorporan más tarde que los hombres a las actividades políticas, cuando crecen las y los hijos o cuando son solteras o separadas o tener menos hijos que los varones en la política.
En los sectores populares especialmente, además de trabajo remunerado, las mujeres asumen cargas de cuidado y generan amplias redes sociales que les permita acceder a los programas para grupos vulnerables.
El neoliberalismo y capitalismo salvaje, sostuvo el presidente Correa, se convirtió en expulsor de las mujeres de sus países y la mayor vulnerabilidad recae en las trabajadoras domésticas.
El salario mínimo en Ecuador es de 170 dólares (USD) por mes, «pero era de 80 dólares para las trabajadoras domésticas, esa forma generalizada de explotación que existe en muchas partes de América Latina y algún día ojalá sea desterrada».
Este año subió a 120 dólares (USD), explicó el mandatario al anunciar que espera que en 2008 se pueda equiparar al salario mínimo general para acabar con esa «explotación legalizada, explotación institucionalizada».
2007/MR/GG/CV
