Montserrat Javier Martínez y su esposo Néstor Delgado Meneses no van a desistir de su queja hasta que la delegación estatal del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) reconozca la presunta negligencia que el pasado 14 de octubre puso en riesgo la vida de Montserrat al negarle la atención por no presentar su carnet de citas.
La pareja acudió al órgano interno del IMSS y a las comisiones estatales de Arbitraje Médico y de Derechos Humanos para solicitar que se castigue a los médicos que negaron la atención de emergencia por un parto prematuro de su embarazo de 16 semanas y media, sin embargo el proceso de investigación se ha vuelto tardado.
Hace apenas unos días, la primera visitaduría general de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) envió un oficio con fecha de 23 de noviembre para informar a la pareja que su queja fue recibida y que las investigaciones y trámites iban a iniciarse de inmediato, más no estipula el tiempo que éstos pueden demorar.
La Comisión Nacional de Arbitraje Médico también comunicó vía escrita la admisión de la queja, así como la solicitud del expediente médico y la resolución del consejo consultivo al IMSS.
El pasado 14 de octubre, Monserrat fue llevada por su esposo Néstor y su madre Mercedes al Hospital de Zona número uno del IMSS. En el área de urgencias un médico y una doctora revisaron a Monserrat pero condicionaron su hospitalización a la presentación del carnet de citas.
Mientras su esposo volvía a su casa por el documento, la señora Mercedes, quien es enfermera en una clínica del IMSS, atestiguó cómo su hija expulsó a su bebé de 16 semanas y media de gestación, en tanto los médicos se mantenían firmes en su postura de no atenderla.
Ante la gravedad de la situación y la indiferencia del personal médico del IMSS, la madre de Monserrat la trasladó a una clínica particular, donde fue recibida «con un sangrado severo transvaginal provocado por la expulsión incompleta de su embarazo de 16 semanas y media, que a su vez se debió a una incontinencia cervical uterina».
Lo anterior consta en un certificado médico en hoja membretada expedido por el doctor particular Jesús Guzmán Gardeazabal.
REUNIÓN DISUASIVA
A petición de Néstor Delgado, el pasado viernes 16 de noviembre, el delegado del IMSS, Luciano Galicia Hernández, recibió a la pareja en sus oficinas, donde de una forma sutil, el funcionario intento disuadirlos para que eviten acudir a los medios de comunicación porque «las notas publicadas dañan su desempeño como delegado».
El funcionario del IMSS informó que la queja tardará en resolverse 70 días naturales a partir de que se presentó el escrito, es decir hasta enero del próximo año.
Justificó además a los médicos que no quisieron hospitalizar a Monserrat por la falta de la carnet de citas, ya que existen casos en donde los médicos que han atendido a personas que no son derechohabientes terminan pagando los gastos que se generan.
El encuentro, lejos de dar confianza a Monserrat y a Néstor de que el caso será investigado, les provoca impotencia porque ambos dudan que la queja proceda.
Aún así, Néstor Meneses se mantiene decidido en llegar a las últimas consecuencias y no va a parar hasta que se castigue al personal que le negó el servicio a su esposa para evitar así que este tipo de casos vuelvan a ocurrir.
07/NAD/GG
