Mujeres de la entidad exigieron al procurador de justicia del estado de Veracruz, Salvador Mikel Rivera, la remoción del agente investigador del Ministerio Público Bernardo Hernández Muñoz, quien varias veces se negó a recibir denuncias de violencia contra Adelina Ramos Nato.
Con pancartas, mujeres de este municipio veracruzano denunciaron que la falta de equidad en la aplicación de justicia contribuyó para que se cometiera el asesinato de Adelina y del que, como presunto responsable, se acusa a Jesús Hernández Nava, su ex esposo.
Las hijas de la víctima señalaron públicamente ante el procurador de Veracruz que en más de tres ocasiones su madre se presentó ante el fiscal local para denunciar las agresiones y amenazas de muerte de que era objeto por parte de Hernández Nava. Sin embargo, puntualizaron, el agente ministerial se negó a recibir la denuncia y sólo se concretó a recomendar a la agraviada resolver de manera «pacífica» un problema «de índole familiar».
«Si el licenciado Hernández Muñoz hubiera hecho caso, mi madre no estaría muerta, por lo que exigimos su destitución o renuncia». «Cuántas muertes más quiere el licenciado Bernardo para que nos tome la denuncia», eran algunas de las leyendas que los familiares de Adelina y otras mujeres, también víctimas de violencia, expusieron en pancartas durante la comparecencia del Procurador General de Justicia de Veracruz, celebrada la tarde de este martes en el municipio de Paso del Macho.
LA DENUNCIA
Adelina fue asesinada con arma blanca y su cuerpo fue encontrado en el patio posterior del ingenio Central Progreso del municipio de Paso del Macho el pasado 6 de agosto; de acuerdo con las versiones de sus hijos e hijas, desde hace varios años sufría violencia por parte de su marido, por lo que optó por divorciarse. Sin embargo, su ex esposo, molesto por el proceder, constantemente la golpeaba; incluso, en febrero fue detenido por la policía municipal tras intentar estrangularla, pero lejos de ser consignado fue liberado por las autoridades municipales.
En esa ocasión, revelan los denunciantes, las autoridades municipales y ministeriales minimizaron el hecho, como ocurre en muchos otros casos en que se denuncia la violencia de que son objeto mujeres por parte sus esposos o parejas sentimentales.
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