Además de abrir la puerta al «desmantelamiento» del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), la reforma a la ley de esa institución recién aprobada en el Senado va encaminada a despojar del derecho a una pensión y jubilación a miles de trabajadoras de nuevo ingreso, alertaron hoy académicas y especialistas en seguridad social.
Advirtieron que las y los actuales trabajadores del IMSS podrían ver afectado en un futuro inmediato su derecho a la seguridad social, ante la posibilidad de que tengan que aportar de sus bolsillos los montos de sus pensiones.
La secretaria técnica de la Comisión de Seguridad Social de la Cámara de Diputados, Odilia Ulloa, advirtió que con las modificaciones a los artículos 277D y 286K de la Ley del IMSS, se sientan las bases para que miles de nuevas trabajadoras del instituto pasen a engrosar la lista de clientes de los sistemas individuales de ahorro para el retiro.
Por su parte, la investigadora de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del Instituto Politécnico Nacional (IPN), Mercedes Cabañas, remarcó que esa reforma «inconstitucional» tiene un efecto «devastador» en las mujeres, ya que ellas acceden en menor medida al empleo, abandonan el trabajo para dedicarse al cuidado de la familia, y por su bajo nivel educativo, ocupan puestos con menor paga y sin seguridad social.
Ambas expertas participaron en la mesa de Medios y Género, organizada por la Fundación Friedrich Ebert y Comunicación e Información de la Mujer (CIMAC), para analizar la reforma al régimen de jubilaciones y pensiones (RJP) de las y los trabajadores del IMSS, y su impacto en la vida de la población femenina.
Odilia Ulloa explicó que la intención a mediano plazo del gobierno del presidente Vicente Fox, es generar un «conflicto económico» en el IMSS ante una eventual incapacidad financiera del instituto, para pagar las pensiones y jubilaciones de sus trabajadoras y trabajadores.
De ese modo –apuntó-, el gobierno se aprestaría a «rescatar» al IMSS y pagar con los impuestos del pueblo esos derechos laborales. Así, resaltó, se liquidará el sistema de reparto solidario de la institución para pasar a un sistema de pensiones capitalizado y administrado por empresas privadas.
La secretaria técnica de la Comisión de Seguridad Social de la Cámara baja –presidida por el diputado del PRD, Miguel Alonso Raya-, calificó la reforma a la Ley del IMSS como un «pinochetazo», ya que pretende emular el modelo de seguridad social implantado en Chile durante la dictadura.
Ulloa enfatizó que las modificaciones aprobadas por el Congreso son «ambiguas», y dejan abierta la posibilidad para que el IMSS contrate a muchas trabajadoras eventuales, con la consiguiente afectación en sus prestaciones de ley, ya que en los artículos transitorios de la reforma se estipula que el instituto contratará personal de acuerdo con su capacidad financiera.
Añadió que la reforma legal prevé la realización de un estudio financiero y actuarial del RJP, con el fin de que el Poder Legislativo avale un eventual incremento de hasta el 15 por ciento en la prima que aportan de su salario las y los trabajadores para su pensión y jubilación. Actualmente la prima es de tres por ciento.
Mercedes Cabañas destacó que se ha demostrado «ampliamente» que el sistema de cuentas individuales de pensiones que se pretende imponer al personal del IMSS y otras paraestatales como Petróleos Mexicanos (PEMEX), Compañía de Luz y Comisión Federal de Electricidad (CFE), es «más desventajoso» para las mujeres por su modo de inserción en el mercado de trabajo.
«Si los hombres reciben una renta vitalicia pequeña, para las mujeres en general es más baja todavía» debido a su rol de género, lamentó, al precisar que la pensión de las trabajadoras será «ínfima, apenas de un salario mínimo».
En este marco, la académica sostuvo que el sistema de Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores) es «sexista» por discriminar a la población femenina.
Para colmo, las condiciones de vida de las mujeres de edad avanzada -con mayor esperanza de vida pero afectadas en su amplia mayoría por enfermedades crónico degenerativas-, se verán mucho más agravadas al contar con una pensión «ridícula» para satisfacer sus necesidades básicas, alertó.
Finalmente, la secretaria técnica de la Comisión de Seguridad Social de la Cámara de Diputados, Ulloa dijo que la reforma del IMSS forma parte de una estrategia para «desmantelar» los servicios médicos de la institución.
Advirtió que con la creación en el 2000 de las Instituciones Especializadas en Servicios de Salud (ISESS) que competirán con las instituciones públicas para ofrecer servicios sanitarios, el IMSS quedará como un instituto «asistencial» para dar atención solamente en el primer nivel a la población «más pobre, más vieja y más enferma, en su mayoría mujeres».
2004/RM/GV/SM
