La migración es el resultado de políticas de apertura económica y de la globalización, las cuales han afectado cada vez más a las mujeres, prueba de ello son las migraciones, a nivel interno y externo, que se incrementan, indicó la socióloga Ana Silvia Monzón.
A decir de la experta, en Guatemala las mujeres constituyen el 28 por ciento de la corriente migratoria hacia Estados Unidos; en el caso de la migración interna, ellas constituyen el 54 por ciento y cuando se habla de migración hacia Guatemala la cifra es de 62 por ciento.
Según Monzón, la mayoría de las guatemaltecas que viajan a otro país lo hacen para mejorar sus condiciones de vida y las de sus familias; muchas pasan a ser trabajadoras del hogar o se integran al sector agrícola o a otra clase de labores, como el cuidado de personas.
De acuerdo con la socióloga, este aspecto no afecta únicamente a las mujeres que migran, pues también más de dos millones y medio de mujeres que son receptoras de remesas se ven afectadas, ya que muchas veces por las dificultades en el mercado laboral, principalmente estadounidense, se ven obligadas no sólo a responsabilizarse de la familia, sino a generar ingresos.
La Organización Internacional de las Migraciones (OIM) subraya que son más de 400 mil mujeres las que han migrado hacia Estados Unidos, refirió la feminista.
Monzón dijo que una de las causas por las cuales las mujeres migran es que no hay un mercado laboral que realmente logre ofrecer trabajos dignos para ellas, e indicó que mientras no haya medidas estatales que favorezcan realmente a la población el flujo migratorio continuará.
La especialista fue una de las expositoras en el seminario «Mujeres ante los procesos de apertura comercial», evento convocado por el Instituto de Estudios Agrarios y Rurales (IDEAR) y la Secretaría Presidencial de la Mujer (Seprem), al que asistieron investigadoras e investigadores de Guatemala y México.
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