La equidad entre mujeres y hombres es una de las condiciones para un nuevo plan alternativo de desarrollo, concordaron 225 organizaciones civiles este fin de semana durante el Segundo Diálogo Nacional.
Este diálogo reunió a los principales sindicatos independientes de México, organizaciones sociales, campesinas, intelectuales y académicos que se oponen al proyecto neoliberal de Vicente Fox para reconocer, entre otras cosas, la necesidad de una justicia social con equidad de género, informó hoy la Red Mexicana de Acción contra el Libre Comercio (RMALC).
Las mujeres, concluyeron en algunas de 140 ponencias presentadas durante el 4 y 5 de febrero pasados, deben tener garantías para decidir sobre su cuerpo y planificar sus vidas y también para que se castigue «con toda severidad toda forma de discriminación, hostigamiento sexual y violencia.»
La reproducción humana debe considerarse un asunto de interés social y responsabilidad colectiva por lo que es necesario defender las licencias de maternidad, así como otras medidas que garanticen la participación plena de las trabajadoras en los espacios de decisión.
El consenso plasmado en la Declaración de Querétaro anuncia movilizaciones para revertir «las reformas constitucionales y legales con las que el neoliberalismo ha socavado el espíritu original del constituyente de 1917», así como a detener las «reformas estructurales».
Plantea asimismo «impedir la firma de nuevos tratados internacionales lesivos a nuestra soberanía y nuestra constitución.»
Entre los firmantes destacan los sindicatos de electricistas, telefonistas, del Seguro Social, de la UNAM, la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), la Promotora Nacional contra el Neoliberalismo y la RMALC, entre otros importantes actores sociales, académicos y políticos del país.
2005/MR
