La asesora económica de Unifem, Yassine Fall, llamó hoy aquí a las mujeres mexicanas organizadas a proponer alternativas macroeconómicas que tomen en cuenta las aportaciones económicas femeninas en las cuentas públicas, para incidir en los presupuestos gubernamentales.
En un seminario organizado por el gobierno de Oaxaca y el Fondo de Desarrollo de Naciones Unidas para la Mujer (Unifem), Fall convocó a los organismos civiles de mujeres a dialogar con los representantes del poder político y económico, para que las políticas económicas beneficien a las mujeres.
En un hotel de la capital oaxaqueña, Fall, quien concluye este viernes una visita de cinco días a México, afirmó que la lucha de las mujeres debe ser respaldada por varones sensibles a la problemática femenina y aseguró que Unifem apoya en el mundo el diálogo entre mujeres organizadas y poderes públicos para construir políticas macroeconómicas sensibles al género.
Explicó que el análisis para diseñar presupuestos públicos con enfoque de género comienza por cuantificar y hacer evidente el aporte del trabajo doméstico de las mujeres a las cuentas nacionales.
Destacó que tal análisis no debe postergarse en ningún país del mundo, toda vez que es una inmensa labor de la población femenina que no es remunerada.
La ex funcionaria de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación (FAO) y del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), criticó las políticas gubernamentales tendientes a privatizar servicios públicos como salud y educación y sostuvo que tales medidas incrementan el trabajo no remunerado de las mujeres.
Puso como ejemplo que las reformas al sector salud en América Latina, han provocado recortes de personal médico, con lo que las mujeres deben ir a los hospitales públicos a cuidar a sus familiares enfermos.
La asesora económica nacida en Senegal advirtió que ese trabajo adicional de las mujeres se traduce en un ingreso para los gobiernos y las economías nacionales. Definió al trabajo femenino no remunerado como un «impuesto social» que pagan las mujeres.
Abundó que las mujeres deben participar también en transformar los modelos de pago de la deuda externa y en el diseño y aplicación de los impuestos. Dijo que esas actividades económicas tienen impacto diferenciado en hombres y mujeres.
La también directora del Departamento de Estudios de la Mujer en la Universidad de Rutgers, en Nueva Jersey, Estados Unidos, dijo que al pagar sus deudas externas los gobiernos recortan el gasto social, y que el cobro a la población de impuestos como el IVA daña más a las mujeres pobres debido a su escaso ingreso económico.
La especialista en género y macroeconomía resaltó que los presupuestos públicos que tienen un enfoque de género (que toman en cuenta las necesidades específicas de hombres y mujeres y el impacto diferenciado en la aplicación de los recursos), son una medida fundamental para reducir la pobreza de la población en general.
Indicó que para lograr esa meta, se debe realizar un diagnóstico de la pobreza con base en la medición de cómo emplean el tiempo las mujeres para calcular su aporte económico no remunerado. Insistió en que es imprescindible que las organizaciones de mujeres influyan en el proceso de desarrollo.
Yassine Fall afirmó que el mundo le ha fallado a las mujeres, y que los gobiernos deben preocuparse más por resolver la pobreza a partir de las condiciones locales, que con base en las recomendaciones de la Organización Mundial de Comercio.
Concluyó que es necesario construir nuevas formas de hacer política económica en aras de lograr la equidad y la igualdad entre los géneros, ante el fracaso de políticas de organismos multilaterales de crédito como el Banco Mundial para intentar abatir la pobreza.
El Seminario Internacional Género y Presupuestos Públicos, Experiencias Nacionales y Locales: Impactos y Alcances, tuvo como objetivo fortalecer el debate sobre los conceptos, métodos e instrumentos para formular y analizar presupuestos nacionales, estatales, sectoriales y locales desde la perspectiva de género.
En el evento participaron además representantes de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), laFacultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), el Instituto de la Mujer Oaxaqueña (IMO), y funcionarios de la Secretaría de Finanzas del gobierno local.
2003/RM/MEL
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