En vísperas de la designación de la persona que presidirá la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), misma que quedará en manos de la Cámara Alta del Congreso de la Unión, la organización internacional Artículo 19 lanzó un llamado al Senado de la República para que garantice un proceso de designación, transparente, plural y abierto al diálogo con la sociedad civil.
El organismo señaló en comunicado de prensa –en el marco del fin de las comparecencias de las y los aspirantes a la presidencia de la CNDH ante el Senado de la República– que el único fin de este llamado es que la decisión que tomen las y los representantes del Senado esté basada en las capacidades técnicas de la candidata o el candidato, y que el proceso no sea contaminado con intereses políticos específicos.
Dicha elección será discutida el próximo 26 de octubre en la Cámara Alta, y deberá efectuarse a más tardar el 29 del mismo mes.
Cabe recordar, en este contexto, que el pasado miércoles 7 de octubre, en conferencia de prensa, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, Rosario Ibarra de Piedra, denunció un pacto entre senadores del Partido Acción nacional (PAN) y Manlio Fabio Beltrones, coordinador del Partido Revolucionario Institucional (PRI), para elegir al ex visitador Mauricio Farah como titular de la CNDH a cambio de la ratificación en el Senado, que tuvo lugar el mes pasado, del Procurador General de la República, Arturo Chávez Chávez.
DEBERES DESATENDIDOS
«Las posturas asumidas por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en temas relacionados con los derechos sexuales y reproductivos, en crisis como la de San Salvador Atenco y Oaxaca, así como su actuar en el caso de Ernestina Asencio y la injustificada dilación en denunciar la tortura de la que fue objeto Lydia Cacho en 2006, son muestras concretas de bajo desempeño de los estándares internacionales de derechos humanos y la necesidades de la sociedad mexicana», indicó en su documento Artículo 19.
La organización indicó que ante la cada vez más extensa lista de asignaturas pendientes en materia de derechos humanos, el incremento de las tensiones políticas y sociales, la crisis en materia de seguridad pública y la falta de voluntad del Estado mexicano para cumplir de manera efectiva su obligación de promover, proteger y defender los derechos humanos, resulta inaplazable la renovación de la CNDH.
«Es evidente que lo que México necesita es un cambio de rumbo en derechos humanos. Este nuevo rumbo no lo pueden dar personas identificadas plenamente con el actual presidente. Existen diversos candidatos que representan un continuismo del actual proyecto fracasado».
Al respecto, Artículo 19 añadió: «durante los últimos diez años México ha experimentado un estancamiento injustificado en derechos humanos, por lo que un fortalecimiento de dicha institución resulta impostergable».
Muestra de ello ha sido la actitud institucional con respecto a los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres del país: desde octubre de 2008, en los congresos locales de 15 estados de la República se han realizado reformas constitucionales para criminalizar el aborto y el uso de métodos anticonceptivos como la pastilla de anticoncepción de emergencia (PAE) y el dispositivo intrauterino (DIU), sin que hasta el momento el Ombudsman se haya pronunciado en defensa de las mexicanas.
CNDH: ALTO PRESUPUESTO, IMPACTO LIMITADO
Artículo 19 precisó en su texto que con este llamado se suma a los señalamientos hechos por la organización internacional Human Righ Watch (HRW) a la CNDH en 2008, así como a los señalamientos de Amnistía Internacional (AI) acerca del proceso de designación del próximo presidente o presidenta del organismo.
De acuerdo con el documento de la organización, la presencia, por casi diez años, de José Luis Soberanes al frente de la Comisión se ha caracterizado por las posturas contrapuestas, la falta de transparencia y la confrontación con amplios sectores de la sociedad civil organizada, tanto nacional como internacional; deficiencias que no se han subsanado a pesar de que «hace diez años la CNDH tenía un presupuesto de 46.5 millones de pesos, y este año alcanza los 912.5 mdp».
A pesar del incremento en el presupuesto de la CNDH, el impacto de su actuación en la situación general de los derechos humanos en el país ha sido por demás limitado.
«Hoy el doctor Soberanes entrega una CNDH debilitada y cuestionada por amplios sectores de la sociedad. Su alejamiento de los movimientos de defensores de derechos humanos es una muestra de su indolencia», puntualizó el comunicado.
Artículo 19 es una organización internacional, con oficinas en México y Brasil, que trabaja desde el año 2000 en favor del acceso a la información y la libertad de expresión, en coordinación con redes de la sociedad civil y organismos internacionales como la Relatoría para la Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos (OEA).
09/GTR/YT
