La política de desarrollo social del Gobierno del Distrito Federal ha sido incapaz de rescatar a cerca de 12 mil infantes de la calle, de los cuales más de cuatro mil son mujeres y un alto porcentaje, madres, afirmó el presidente de la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), José Antonio Arévalo.
Dijo que del total de infantes en esa situación de vulnerabilidad, sólo se logran rehabilitar entre 12 y 20 al año y comentó que se impulsan programas de orientación sexual a niñas de la calle que son madres, a quienes se les brinda asistencia medica, al igual que a sus hijas e hijos.
Arévalo informó que la Comisión que preside promueve una ley que ayude a ese sector de la población vulnerable a incorporarse a la vida productiva.
Entrevistado en el marco del Foro Interdisciplinario para promover la iniciativa con proyecto de decreto que reforma diversas disposiciones en materia de guarda y custodia y derechos de convivencia de los menores, realizado en el salón Luis Donaldo Colosio, del Recinto Legislativo de la ALDF.
«Realmente es urgente de tomar cartas en el asunto, pues aunque no existe un censo de cuántas niñas y niños viven en la calle, este sector de la población aumenta día con día a consecuencia de la extrema pobreza en que viven sus familias por lo que se ven obligados a salir de sus casas para trabajar desde muy pequeños».
El diputado local del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), dijo que tanto autoridades administrativas como las y los legisladores, deben unir esfuerzos y ayudar a los infantes para quienes la calle representa la única escuela que tienen a su alcance.
Actualmente consideró que las y los niños que están en la calle son producto directo de la descomposición social, el desempleo, los bajos salarios y la falta de educación de los padres que los maltratan y golpean.
Ante ello, sostuvo que el gobierno y la Asamblea deben tener como prioridad el mejoramiento de las condiciones de vida de ese sector que vive en la orfandad, en avenidas, parques, coladeras, edificios abandonados y en todo el espacio urbano que le pueda brindar protección.
2004/JG/GV/SM
