La Organización Mundial de la Salud (OMS) señaló hoy que cada año mueren 904 mil 400 niños en los primeros días de vida como consecuencia de complicaciones del parto, además de que 1.02 millones más mueren durante el alumbramiento.
En un estudio dado a conocer por el Centro de Noticias de las Naciones Unidas, la OMS publicó por primera vez una serie de definiciones específicas sobre las distintas causas de muerte de los recién nacidos.
El término «asfixia del nacimiento» incluía antes otras causas de muerte del bebé, como las complicaciones de ser prematuro, pero el nuevo informe elabora la clasificación más rigurosa obtenida hasta la fecha valiéndose de nuevos métodos para procesar los datos disponibles de sistemas de registro civil y de investigaciones previas.
Según estos estudios, las mujeres de Africa tienen una probabilidad al menos 16 veces mayor de perder a un bebé durante el parto que las mujeres de Europa occidental. Las defunciones por asfixia en el parto representan el 8 por ciento de todas las defunciones de menores de cinco años, lo que hace de ésta la quinta causa más frecuente de muerte entre los niños, después de la neumonía, la diarrea, las infecciones neonatales y el nacimiento prematuro.
Sin embargo, apenas se dedica atención o fondos para hacer frente a la asfixia del nacimiento, que rara vez figura en las listas de las causas de muerte infantil.
El informe destaca la discapacidad a largo plazo entre los bebés que sobreviven a la asfixia del nacimiento como un problema importante pero poco estudiado, e insta a adoptar un nuevo enfoque integral de la salud materna, del recién nacido y del niño.
La OMS señaló que existen soluciones para salvar a muchos de los niños que mueren durante el parto, pero esas opciones no llegan a las mujeres y los niños que más las necesitan.
En los países ricos, el 99 por ciento de las mujeres dan a luz con la ayuda de una partera calificada. En cambio, sólo alrededor de un tercio de las mujeres del Africa subsahariana y de Asia meridional cuentan con esa ayuda, y son muchas menos las tienen acceso a atención obstétrica de urgencia. De los cinco millones de bebés que requieren reanimación cada año, menos del 5 por ciento se benefician de un asistente preparado y equipado para efectuarla.
2005/GM