El fundamentalismo católico es igual de nefasto para las mujeres que el fundamentalismo islámico, aseveró Alda Facio, quien participó en la capital del estado de Yucatán en el taller Instrumentos Internacionales para la Defensa y Protección de los Derechos Humanos de las Mujeres.
Entrevistada por Cimacnoticias, Facio consideró que en nuestros países se habla mucho del horror del fundamentalismo islámico, pero el católico es igual de pernicioso, las mujeres mueren gracias a él.
Expresó que por falta de información y educación sexual unas 500 mil mujeres mueren anualmente por abortos realizados en condiciones inseguras y una mujer fallece cada minuto por causas relacionadas con el embarazo y la maternidad. Es la jerarquía católica quien ha influido en los gobiernos para que esa información tan necesaria no llegue a las mujeres.
Cada día crece el esfuerzo de la jerarquía católica, el Opus Dei y el Vaticano para frenar el avance de los derechos humanos de las mujeres, denunció la integrante del Instituto Latinoamericano de las Naciones Unidas para la Prevención del Delito y Tratamiento del Delincuente.
Facio dijo que el movimiento es muy fuerte, viene de la mano del conservadurismo político, de la globalización neoliberal y puso como ejemplo que en muchos países no se ha ratificado el protocolo opcional de la Convención para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW).
Adjudicó la negativa de muchos gobiernos a firmar el protocolo a la influencia de la Iglesia Católica, ya que ha manipulado la información diciendo que es un instrumento que obliga a los estados a legalizar el aborto, lo cual no es cierto.
El protocolo es un procedimiento que permite a las mujeres poner denuncias por violación a sus derechos establecidos en la convención, aseguró.
Mienten y tergiversan la realidad, asustan a muchos legisladores que piensan que al votar a favor del protocolo lo están haciendo a favor de la despenalización del aborto, precisó.
Señaló que en muchos países de Centroamérica el aborto es un tema tabú en donde el movimiento ha sido por penalizar más esta decisión. No se permite, añadió, ni siquiera en casos de violación múltiple, como el caso de una niña nicaragüense de nueve años que en Costa Rica no tuvo acceso a esos servicios.
Hay mas avance en la aceptación de la homosexualidad que en la del aborto y eso nos dice mucho de dónde esta el meollo del problema, el permitir a las mujeres decidir sobre su cuerpo, tener autonomía reproductiva es un golpe demasiado fuerte para el patriarcado y el capitalismo, porque mientras las mujeres no tengan decisión sobre su cuerpo se puede hacer con ellas lo que se quiera.
2003/SCH/MEL
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