En Estados Unidos millones de inmigrantes mujeres y hombres que trabajan en los campos, en oficinas, cuidando enfermos y fabricando casas, no tienen acceso a educación y servicios médicos por su situación de indocumentados, reveló el vicepresidente de la Unión Internacional de Empleados de Servicio (ALF/CIO, por sus siglas en inglés), Eliseo Medina.
Al participar en el primer Foro de Reflexión Binacional, Eliseo Medina señaló que esas trabajadoras y trabajadores contribuyen a la seguridad social y bienestar económico de la nación norteamericana, y que, sin embargo, corren el riesgo de ser deportados o perder la oportunidad de regularizar su situación migratoria, si solicitan cuidado médico para su familia.
Para el dirigente de la ALF/CIO, de origen mexicano, las y los migrantes no sólo están expuestos a sufrir maltrato en el trabajo sino que son usados con fines políticos, como es el caso del ex gobernador de California, Pete Wilson, quien los culpa de los problemas económicos y sociales del país.
En el evento, organizado por la Fundación Solidaridad Mexicano Americana y el Senado de la República, el integrante de la de la ALF/CIO denunció que organizaciones anti-inmigrantes promueven iniciativas electorales, como la llamada Proteja Arizona Ahora, que actualmente está circulando en ese estado norteamericano, mientras que otros grupos se articulan para cazar inmigrantes en la frontera.
Por eso, destacó Medina, es urgente que las leyes de inmigración sean reformadas de manera que se resuelva este problema, «tomando en cuenta la realidad que existe tanto en México como en Estados Unidos».
El vicepresidente de la ALF/CIO, dijo que para los trabajadores indocumentados, la propuesta del presidente George W. Bush, de otorgar permisos por tres años –que pueden ser prorrogados por otros tres–, no es una verdadera solución.
Mi temor, resaltó Medina, es que si esta propuesta es aprobada en el Congreso norteamericano, crearía un sistema de trabajadores divididos por clases, es decir, nativos legales; trabadores temporales y los indocumentados. «En esta situación de mercado libre, saldríamos perdiendo».
Para Medina un nuevo programa de trabajadores temporales, debe contener protecciones en contra de la explotación, es decir, incluir, entre otras, todas las protecciones de las leyes de trabajo y la residencia permanente para aquellos que así lo deseen.
Estamos, concluyó, conscientes de que es un momento difícil para buscar una reforma amplia. «Para tener éxito, es importante que el gobierno de México mantenga su posición a favor de los inmigrantes y que no se conforme con una solución que contenga sólo un nuevo programa de braceros».
2004/RGL/BJ/SM
