En algunos países reconocer que las mujeres han contribuido a la construcción de la nación es un hecho poco frecuente y si se tiene la osadía de colocar una corona para la «Soldada Desconocida» puede resultar en un reclamo publico.
En 1970; Monique Wittig fundadora e integrante de las «Feministas Revolucionarias» protestaron en Paris por ignorar el trabajo de las mujeres en la construcción de la nación francesa y pretenden colocar una guirnalda inscrita «a la esposa desconocida del soldado «en la tumba del soldado desconocido.
Acto que fue reprobado por la sociedad francesa, sin embargo, el mayor mérito de Monique Wittig fue el declararse lesbiana y desarrollar la literatura lésbica en un mundo donde la sociedad margina e ignora el derechos de las personas a elegir su preferencia sexual.
Monique Wittig nació en Dannemarie, Alto Rin en 1935, estudió en la Universidad de París y trabajó en la Biblioteca Nacional de la capital francesa y en una editorial.
Tradujo a Herbert Marcuse al francés. Colaboró con Simone de Beauvoir y la economista socialista Christine Delphy en la revista Questions feministes.
Acérrima defensora del derecho a la libre determinación Monique señalaba «Los discursos que particularmente nos oprimen a todas nosotras y a todos nosotros, lesbianas, mujeres y homosexuales, son aquellos que dan por sentado que lo que funda una sociedad, cualquier sociedad, es la heterosexualidad»
La escritura de Wittig consiste en destruir a las categorías de sexo en política y en filosofía, destruir al género en el lenguaje (al menos modificar su uso) es parte de su obra como escritora.
Monique Wittig escribió novela, teatro, ensayo y poesía, además de dedicarse a la docencia universitaria en Francia y los Estados Unidos.
Algunos de sus trabajos son: L’Opoponax (novela, 1964), Les guérrillères (novela, 1969), Le corps lesbien (poesía, 1973), Le voyage sans fin (teatro) y los ensayos La pensée straight (1978) y One is not born a woman (1980).
La mente hétero está dedicado a las lesbianas de los Estados Unidos y es el texto que Monique leyó en el marco del Congreso Internacional sobre el Lenguaje Moderno, que tuvo lugar en 1978 en Nueva York.
Monique Wittig murió en enero de 2003 en Tucson, Arizona y nos heredó la construcción de un nuevo lenguaje y el respeto a la preferencia sexual de la humanidad.
2004/EC/LR