Un total de 198 solicitudes de amparos de igual número de mujeres contra la reforma al artículo 12 de la Constitución de Oaxaca que protege la vida desde la fecundación, fue presentado este miércoles en las oficinas del Poder Judicial Federal con base en la defensa de nueve artículos constitucionales violentados por dicha modificación.
Al terminar el foro «El derecho a decidir de las mujeres, argumentos legales y sociales para su defensa», ONG como MUGER y Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad presentaron, por separado, los documentos mediante los cuales 198 mujeres interpusieron amparos contra la «ley del no nacido».
Yéssica Sánchez Maya, integrante de la Red Radar Cuatro, señaló que estos juicios de amparo constituyen la segunda parte de la resistencia de las mujeres frente a la embestida de la derecha cristalizada en la aprobación de dicha ley por el Congreso local.
La abogada señaló que mediante esta reforma las mujeres quedaron en franca vulnerabilidad, «por lo que regresamos al debate a través de los amparos al Poder Judicial, apéndice de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Confió en que será a finales de diciembre cuando se tenga una respuesta de las autoridades judiciales».
Antes, durante el foro, la periodista Sara Lovera, el diputado federal Víctor Hugo Círigo Vásquez y el abogado Pedro Morales Aché, secretario ejecutivo del Colegio de Bioética, advirtieron sobre el avance de la derecha en México –la amenaza ultraconservadora– y coincidieron en la necesidad de estar alertas frente a lo que hay detrás de la violación al derecho a decidir de las mujeres.
Con respecto a la reforma, tanto la periodista como el diputado coincidieron en que «estamos atestiguando un acuerdo político entre el Partido Revolucionario Institucional y el Partido Acción Nacional». Por su parte, Morales Aché realizó un análisis detallado de las razones por las cuales la reforma al artículo 12 de la Constitución local es, a todas luces, anticonstitucional.
En el foro de organizaciones sociales oaxaqueñas que defienden el derecho a decidir de las mujeres, la periodista Sara Lovera sostuvo que aún hay tiempo para revertir las reformas constitucionales en 15 estados del país, un acto que calificó como «el retroceso más grande» de los derechos de las mujeres desde 1940, cuando las médicas mexicanas impulsaron la legalidad del aborto terapéutico por violación.
«Hoy tenemos que dar una respuesta política frente al nuevo avance de los derechos de las mujeres», añadió la periodista, quien habló a nombre del Colectivo de feministas Socialistas.
En el acto, realizado en el corazón del paseo Juárez, Lovera se refirió al evidente desprecio con que las autoridades de todos los poderes tratan a las mujeres que reclaman y reivindican leyes de permisibilidad del aborto hasta las 12 semanas de embarazo, como en el Distrito Federal.
Apuntó, asimismo, que «lo grave es la insensibilidad de las y los diputados», no sólo de México, sino de Latinoamérica, donde se busca retroceder en los derechos de las mujeres. «En cuestiones de aborto la voz de las mujeres es la primera que tiene que ser escuchada», indicó.
Tras exponer algunos casos que ejemplifican cómo se ha retrocedido en los derechos de las mujeres, Sara Lovera se refirió a Guanajuato, Puebla, Veracruz, Campeche y Quintana Roo, donde hay 40 mujeres presas de conciencia; 20 de ellas en Guanajuato, donde las sentencias hablan de homicidio por razón de parentesco con base en «una fórmula engañosa y perversa».
Añadió que aunque las mujeres han realizado acciones para detener esta ofensiva en todo el país, se requiere «potenciar acciones más complejas y estratégicas» para defender su derecho a decidir.
Por su parte, el diputado federal Círigo Vásquez afirmó que negar derechos fundamentales «porque lo dijo un Dios, porque la interpretación jerárquica eclesiástica ha pedido sobreponerse a los órganos de representación política, es una afrenta inadmisible para un Estado democrático moderno, porque traiciona el mandato constitucional de garantizar el ejercicio de derechos ciudadanos».
Apuntó que en este retroceso es ineludible la responsabilidad del Partido Revolucionario Institucional, «que ha decidido renunciar a sus apariciones republicanas, a su supuesta conciencia del Estado laico».
A su vez, Pedro Morales Aché sostuvo que la reforma al artículo 12 local violenta todo el plexo normativo de derechos fundamentales que están reconocidos en la Constitución federal, los cuales se derivan de tratados y convenciones internacionales en materia de derechos humanos celebrados y ratificados por México.
Finalmente, sostuvo que la reforma de Oaxaca establece una especie de «misoginia constitucional» que postula que la gestación y la maternidad son, implícitamente, obligaciones de las mujeres.
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