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Mujeres, protagonistas del movimiento social en Oaxaca

Maestras, estudiantes, amas de casa, comerciantes, esposas, dejaron su papel de apoyo para convertirse en actoras principales de la lucha popular.

Sus nombres y sus voces se multiplican. Son amas de casa, mujeres de colonias, maestras marcadas por el recuerdo del olor a gas que se quedó en su piel, madres solteras, esposas, comerciantes, universitarias que comparten el espacio con niñas de secundaria y preparatoria, hijas que acompañan a sus madres, nietas que se transforman con sus abuelas…

Escribieron episodios, incluso con la sangre de sus hijas, hijos, esposos, padres, amigos, a quienes ofrendaron, como en la Independencia lo hicieron las mujeres de Tlaxiaco, encabezadas por la generalísima María Antonia Nava Catalán.

Una de ellas, Nancy, estudiante y locutora del ocupado Canal 9 y luego en Radio Cacerolas, que transmitía desde una estación de la radio comercial, dice que los medios de comunicación han utilizado a la gente, por lo que ahora tenemos que aprender a utilizarlos, que las mujeres creen sus espacios, que se hagan de sus medios, aprendan a pegar cables, a echar andar la señal desde cualquier esquina.

Se organizaron una noche afuera del Edificio de Finanzas, casi frente al monumento a Zapata. No tomarían la tierra, pero sí la palabra. Platicaron sobre la conveniencia de participar, no sólo en la talacha, en traer el café a las barricadas y quedarse a cuidar los espacios, sino en la construcción de la sociedad que deseaban, del gobierno que querían, dice Patricia Jiménez Alvarado.

En el video la Rebelión de las Mujeres Oaxaqueñas, Estela se dice taruga, pues se da cuenta que había perdido el tiempo viendo telenovelas. Lo descubrió cuando las compañeras tomaron los micrófonos y pudo mirar por dentro el poder de los medios.

La investigadora feminista Martha Castañeda opina, en un video producido por Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad y Mal de Ojo TV, que las mujeres se dan cuenta del mal uso que hacen la televisión, la radio y la prensa escrita. Los medios desinforman, eso no es sólo doloroso sino encabrona.

Nancy asegura que hay momentos importantes que cambiaron la conciencia social de las oaxaqueñas. El primero fue el fallido desalojo del magisterio del zócalo, el 14 de junio 2006. Luego las megamarchas, las batallas del 2, 20 y 25 de noviembre.

Layla se convirtió en 2006 en dirigente popular. Dice que el movimiento transformó el papel de la mujer. Pasamos de ser espectadoras, las que apoyaban, que hacían la talacha, alimentaban a los compañeros, a ser protagonistas y a tener en nuestras manos las decisiones y parte de la dirección del movimiento.

EN LA TRINCHERA

Patricia y Nancy compartieron la cabina de Radio Cacerolas, en la calle de Gómez Farias. Las noches son largas detrás de un micrófono en alerta siempre. Las dos rieron, lloraron, se desesperaron, tuvieron miedo, quisieron correr a ratos pero se aguantaron, se quedaron al frente, cuando las otras cabinas se quedaron vacías ante el anuncio de que la policía estaba cerca.

Recuerdan a Fidelia, mujer adulta que combinó su vida familiar con sus 40 años de ejercicio magisterial, atravesando traileres y motos sobre las calles para que no pasara la policía que quería rescatar una de las 15 radiodifusoras comerciales que el pueblo había tomado desde muy temprano el 22 de agosto.

Cuenta Nancy cuando llevaron al canal a los sujetos que habían asesinado a José Jiménez Colmenares, quien solidario marchaba el 10 de agosto de 2006 sobre la calle de División Oriente, acompañando a su esposa, la maestra Florina Jiménez Lucas.

Estábamos en el canal, dice Nancy ahí la doctora Eréndira y yo los recibimos. La ayudé a cumplir con su deber, teníamos que curarlos, la gente enojada los quería linchar y los había golpeado. Teníamos que hacerlo aunque fuera contra nuestra rabia y nuestro coraje por lo que habían hecho. Se reían, decían que nosotros éramos los provocadores, al día siguiente los entregamos a la Cruz Roja, sabíamos que los dejarían libres.

Aprendimos que las mujeres teníamos mucho más que hacer y dar y ahí estuvimos, porque queremos un cambio para Oaxaca.

Marina, madre soltera, ama de casa y comerciante, descubrió sus posibilidades frente a un micrófono y se subió a la lucha magisterial y popular, porque estaba cansada de las injusticias que generan la pobreza, la corrupción, los malos gobiernos.

Quemó sus memorias, un diario de los días aciagos del conflicto, para salvar a su familia. Se ríe, disfruta sus recuerdos, y goza la obtención de su libertad personal que encontró en la lucha.

Como locutora recuerda que un día la citaron en el canal 9 para un programa de 4 a 5 de la tarde. De pronto dijeron que había llegado la PFP, que estaba ahí afuera. Me di cuenta de que no había nadie y tomé el micrófono.

Compañeras y compañeros, la gente de las colonias ha venido a apoyarnos, vengan ustedes también, dije. Me asomaba a la ventana, no se veía nada y seguí llamando a la gente. Después de un buen rato, llegaron otros compañeros: compañera, ya estamos aquí. Cuando salí la calle estaba llena de gente que nos había ido a apoyar.

Es el poder de los medios, dice Marina, quien aquella tarde noche ganó una batalla que marcó la vida de muchas mujeres: 70 fueron encarceladas, 39 trasladadas a un penal de Nayarit. Pero aún siguen los levantones, vejámenes y golpes, explica Mayen Arellanes, del Comité 25 de Noviembre, luego las botan en cualquier lugar.

La APPO tiene que considerar que las mujeres han participado de manera importante y para el bien común; que las formas de organización, de llevar las reuniones, tienen que cambiar para que participen las mujeres y se oiga sus voces, sostiene Martha Castañeda en el video la Rebelión de las Mujeres Oaxaqueñas.

Mencionan también a las mujeres exiliadas como la doctora Bertha Muñoz, locutora de Radio Universidad; la maestra Carmen López, de La Ley del Pueblo, y Aline Castellanos, defensora de derechos humanos, que dejaron un rastro en las ondas hertzianas, el papel, las marchas, en pintas callejeras y en la conciencia de otras mujeres.

07/SJE/GG/CV

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