Entre los países del mundo, México ocupa el décimo cuarto lugar en donde se agrede constantemente a las mujeres, aseguró la directora de la Asociación de Mujeres Sobrevivientes de Abuso Sexual AC (Musas), Juana Núñez Flores.
Agregó que de nueve de cada 10 mujeres mexicanas, de entre 12 y 29 años de edad, han sido agredidas durante sus noviazgos, delas cuales sólo cinco estaban conscientes de ello.
Núñez Flores reconoció que en el ámbito legal la violencia en el noviazgo no está tipificada expresamente, pero puede contemplarse dentro de la violencia familiar.
«Pellizcos, celos, llamadas incesantes, chantaje emocional, insultos o incluso alguna bofetada son tolerados muchas veces por las adolescentes en nombre del amor», aseguró Núñez Flores
«El noviazgo puede convertirse en un caldo de cultivo para las actitudes violentas dirigidas, sobre todo, hacia las mujeres», aseveró la especialista, tras destacar que las acciones violentas más comunes entre las y los jóvenes son los celos, como justificación para agredir a su pareja. Los golpes y los insultos son más recurrentes a partir de los 19 años de edad.
En el marco del Tercer Foro Informativo «El Amor y la Violencia no Hacen Pareja», Juana Núñez externó que los adultos contribuyen a restar visibilidad a la violencia entre las y los jóvenes, toda vez que la consideran normal.
Durante su disertación, la psicóloga dijo que la base para encontrar una solución al problema es aprender a resolver los conflictos con la pareja bajo la premisa de la armonía y el respeto mutuo, y de ello da cuenta 15 años de experiencia en la organización a su cargo Musas.
Asimismo, explicó que para la obtención de dichos datos, el personal calificado de Musas realizó un estudio piloto con una muestra de 3 mil 250 estudiantes, de escuelas públicas en el Distrito Federal y entidades aledañas, con el apoyo del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), para el desarrollo de encuestas.
Resaltó que este fenómeno comenzó a llamar la atención de las instituciones mexicanas recientemente. Desde la familia, y en un contexto más amplio de inequidad social, las y los jóvenes aprenden a relacionarse reproduciendo las desigualdades.
Aún no existen estadísticas para conocer el alcance nacional de la violencia durante el noviazgo. En cuanto a políticas públicas, están en un nivel incipiente.
EN EL DF
El gobierno del Distrito Federal fue el primero en contar con un programa específico enfocado a este problema; medida que posteriormente se aplicó en Tabasco, Chiapas y recientemente en Guerrero y Guadalajara.
Cabe destacar que la Asociación de Mujeres Sobrevivientes de Abuso Sexual es un grupo de autoayuda, en el que se comparten testimonios de las experiencias personales, y hacer sentir a la víctima que no está sola.
Cuenta con un Taller de prevención de abuso sexual, en el que se tratan temas de desarrollo de la autoestima, derechos y obligaciones de las y los niños; además de aprender a cuidar su cuerpo.
Hay también terapia de pareja, enfocada a los padres, principalmente para apoyar el tratamiento de niñas y niños. Sin embargo, también se trabaja con sus demandas como pareja.
Otra temática es el trabajo con violencia familiar y proceso terapéutico, que consiste en que las personas revisen su historial de vida personal, con relación al maltrato, a fin de encontrar las causas de su problemática actual, y encontrar formas positivas de relación con otras personas, lo que tiene como consecuencia un aumento en la autoestima y no permitir más situaciones de agresión familiar.
Y se trabaja con los agresores, o generadores de violencia, quienes deben aceptar que tienen un problema para iniciar con el proceso terapéutico, en el cual se buscan las causas de la conducta violenta, con el fin de entender su problemática y hacerlos responsables de su situación actual. Se les proporcionan las herramientas para que sus relaciones interpersonales sean satisfactorias y exitosas, sin violencia o abuso.
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