Nómina 8 restó ingresos a trabajadoras del Inmujeres-DF

Más de 40 trabajadoras del Instituto de las Mujeres del Distrito Federal (Inmujeres-DF) denunciaron que su inserción al Programa de Estabilidad Laboral (conocido como Nómina 8 y puesto en marcha por el Gobierno capitalino en enero pasado) perjudicó sus ingresos, situación a la que las autoridades no han dado respuesta, dijeron.
 
Ante la inconformidad, Teresa Incháustegui Romero, directora del Inmujeres-DF, dijo a Cimacnoticias que las demandas de las trabajadoras han sido escuchadas, y que la intención de incorporarlas a la Nómina 8 fue para mejorar sus condiciones laborales.
 
A inicios de esta semana, las trabajadoras bloquearon la entrada del Inmujeres-DF para denunciar que tras nueve meses de negociación con las autoridades del instituto no han logrado una mejora en sus condiciones de empleo.
 
En septiembre de 2014, el jefe de Gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera, anunció que las y los trabajadores contratados por la administración capitalina bajo esquemas temporales o de honorarios serían formalizados, y que se regularizarían 40 mil plazas, 27 mil para mujeres.
 
El 31 de diciembre de ese año, en la Gaceta Oficial del DF se publicaron los lineamientos del Programa de Estabilidad Laboral, que pretende “forjar auténticas condiciones de justicia laboral, al buscar de manera progresiva alcanzar, en la medida de la situación económica de la ciudad, que los trabajadores reciban un salario razonable que le aporte bienestar a él y a su familia”.
 
De acuerdo con las 46 trabajadoras, no fueron informadas de su inserción a la Nómina 8, por lo que su incorporación redujo 2 mil pesos a sus ingresos mensuales, y aunque les han descontado las aportaciones al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), no pueden acceder a la atención.
 
Aseguraron que en julio pasado, las autoridades del Inmujeres-DF les informaron de una “renivelación” de sueldos “que no fue real”, y que en la primera quincena de octubre les fueron entregados recibos de una paga retroactiva por los meses de julio, agosto y septiembre, pero –denunciaron– no se realizaron los depósitos.
 
Entrevistada al respecto, Incháustegui Romero aseguró que Nómina 8 se puso en marcha para mejorar las condiciones laborales de las y los trabajadores, y con ello eliminar los contratos trimestrales que se venían estableciendo, y fijar una contratación anual que permitiera el acceso a más prestaciones.
 
Según las disposiciones publicadas, el tiempo de contratación de las y los empleados será de un año mediante nombramiento por tiempo fijo, y las prestaciones a las que tienen derecho son: aguinaldo y un estímulo de fin de año mediante vales de despensa, además de que tendrán acceso a la seguridad social a través de convenios celebrados y aprobados con el ISSSTE.
 
Para cubrir la prestación de servicios médicos –según los lineamientos–, la o el trabajador aportará lo equivalente a 3.7 por ciento y los órganos de administración pública, 8.80 por ciento, ambos del salario base de cotización del o la empleada.
 
La directora del Inmujeres-DF dijo que mucha de la inconformidad de las trabajadoras se desprende de que la incorporación al programa implicó el pago de impuestos y cubrir parte de su prestación en el ISSSTE, (por lo que) “recibieron menos recursos en moneda, pues se estaban convirtiendo en lo que se llama salario social, pero como implicó un recorte de dinero, se molestaron”.
 
Fue así –de acuerdo con la funcionaria– que en abril pasado las trabajadoras le manifestaron su inconformidad, y ella ofreció negociar una “retabulación” laboral, es decir, gestionar ante la Dirección General de Personal del GDF que las trabajadoras pudieran tener un mejor sueldo.
 
Enfatizó que la dependencia a su cargo tiene pocos recursos y que no puede cubrir esos sueldos, al mismo tiempo que no puede tomar decisiones sobre un programa que no maneja directamente, pero que las autoridades correspondientes nunca le “cerraron las puertas a la negociación”, por lo que se mantuvo la expectativa de que la retabulación era posible y que se podía autorizar un pago mayor a partir de julio.
 
Sin embargo la “renivelación” no fue posible en julio, pues se debía esperar a que el Oficial Mayor emitiera una circular para informar de cualquier tipo de retabulación, lo que ocurrió apenas en noviembre pasado.
 
“En ese sentido si bien no ganaron desde julio esa retabulación, y por lo tanto su nivelación de sueldos, sí se consiguió para noviembre pasado, con lo cual a partir de este mes y en el año entrante ya podrán cobrar el nuevo sueldo; esto les fue informado pero consideraron que (esa acción) era insuficiente, y por esa razón tomaron las instalaciones el lunes pasado”, declaró.
 
Inchaustegui Romero aseguró que se tuvo una reunión con las trabajadoras afectadas, y se les explicó que la demanda de cobrar un retroactivo en el que se cubra el monto faltante de su sueldo por los meses de julio a octubre “no es posible, porque la retabulación ocurrió hasta noviembre”.
 
Finalmente dijo que actualmente existe un recorte de presupuesto en el GDF y que si bien una de las prioridades es la seguridad laboral de las y los empleados, la mayoría de los recursos se destinan a programas sociales, es decir, “no podemos conceder todas las demandas a todo el mundo porque no tenemos recursos para ello”.
 
Para 2016, de acuerdo con el paquete presupuestal entregado a la Asamblea Legislativa del DF para su discusión y aprobación, el GDF contempla recursos por 177 mil 834 millones de pesos, lo que representa un incremento de 8 mil 612 millones de pesos en términos nominales respecto del presupuesto aprobado para 2015.
 
Para este año, Inmujeres-DF tuvo un presupuesto de 114 millones 340 pesos.
 
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