Las organizaciones de mujeres y feministas deben darle seguimiento a las negociaciones que hacen los gobiernos con la banca multilateral, toda vez que esos recursos se pagan con impuestos de las y los ciudadanos, expresó Laura Frade, una de las integrantes de la Coordinadora de Organismos Civiles por un Milenio Feminista.
Entrevistada por cimacnoticias la experta en políticas macroeconómicas y participante en el noveno foro internacional de la Asociación para los Derechos de la Mujer y el Desarrollo (AWID, en inglés), efectuado en esta ciudad y donde participan más de mil mujeres de 105 países, aseguró que las organizaciones de mujeres deben vigilar los procesos de negociación que ocurren entre los gobiernos y el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional.
Desde su punto de vista las instituciones financieras multilaterales presionan (en nuestro caso al Estado mexicano) para llegar a acuerdos sobre las políticas y programas de ajuste estructural, incluso la gran mayoría de los legisladores mexicanos desconocen los términos de esas negociaciones.
«En las negociaciones no participa el poder legislativo: los diputados federales sólo se encargan de aprobar el producto final», comentó la investigadora durante el panel Derechos de las Mujeres, globalización e instancias internacionales estratégicas.
Cuando los gobiernos atraviesan por crisis económicas, indicó, se endeudan con los organismos internacionales y el costo de la deuda siempre implica someterse a sus políticas y programas.
Sin embargo, el sometimiento de los países a estas políticas económicas internacionales «se hace a espaldas de la ciudadanía», como se llevaron al cabo los programas de ajuste estructural desde la década de los 80, tanto en el caso mexicano como de la mayoría de los países latinoamericanos.
A manera de ejemplo citó las modificaciones de ley en los sectores de educación, salud, la ley del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), la del Instituto de Seguridad Social y de la Salud para los Trabajadores del Estad0 (ISSSTE) y las actuales presiones para modificar la ley de la industria eléctrica.
Ante este panorama Frade sostuvo que las mujeres y los hombres de México y de toda la región latinoamericana deben informarse primero y luego exigirles a sus gobiernos que les rindan cuentas políticas sobre el tipo de negociaciones que llevan a cabo con la banca multilateral, concluyó.
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