Obligan a gobierno de Querétaro a investigar desapariciones

Tras años de insistencia y manifestaciones, que incluso incluyó un bloqueo de la carretera México-Querétaro, finalmente el gobernador queretano José Calzada Rovirosa, se reunió con madres, hermanas y familiares de personas desaparecidas, ante quienes se comprometió a acelerar y dar seguimiento a las investigaciones.
 
La reunión el pasado 30 de julio responde a la exigencia de las familias que señalaban la falta de acción de las autoridades para dar con el paradero de sus seres queridos, por lo que se acordó acelerar las pesquisas y establecer mesas de diálogo en las que también participe el gobierno federal.
 
Las manifestaciones han sido encabezadas por Brenda Rangel Ortiz, hermana de Héctor Rangel Ortiz, desaparecido el 10 de abril de 2009 en Monclova, Coahuila, mientras realizaba un viaje de negocios.
 
Desde el momento de la desaparición de Héctor, su hermano Enrique y principalmente Brenda se convirtieron en activistas, e iniciaron por cuenta propia su búsqueda.
 
A raíz de ello, Brenda ha sido víctima de amenazas y ataques, incluso de policías de Coahuila, quienes (mientras ella se encontraba en el estado del norte buscando pistas del caso) le dijeron que “no estuviéramos levantando el polvo porque ahí no querían que siguiéramos preguntando”, según información de la propia activista. 
 
El pasado 26 de julio, tras más de cuatro de exigencia de justicia y de sufrir diversos altercados, varias familias queretanas, principalmente madres, se manifestaron frente a las oficinas del gobierno del estado de Querétaro.
 
Su objetivo era una audiencia con el gobernador Calzada Rovirosa, el procurador del estado, el consejero de Seguridad y el delegado de la PGR en Querétaro, para acordar acciones de búsqueda y localización de personas que han desaparecido en la entidad.
 
Un día después de la protesta, las llantas de la camioneta de trabajo de Brenda Rangel amanecieron ponchadas, lo que activistas y defensores que la respaldan con la organización Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos, calificaron como una amenaza para impedir que las familias “sigan exigiendo se busque a sus seres queridos”.  
 
Lejos de detener su exigencia, Brenda y otras familias cerraron un tramo de la carretera México-Querétaro para demandar la reunión con el gobernador que finalmente se celebró este miércoles 30 de julio.
 
Las amenazas y ataques contra Brenda han sido motivo de preocupación de la Red Todos los Derechos para Todas y Todos y la organización Amnistía Internacional, que han requerido a los gobiernos local y federal la urgencia de proteger de manera adecuada a la activista.
 
14/AZM/RMB