El ex diputado federal priísta, Élmar Darinel Díaz Solórzano, recluido en el Cereso del municipio de Villaflores, como presunto homicida de su esposa, Tatiana Trujillo Rodríguez, se declaró inocente y el juez que lleva el caso, empieza a manejar la hipótesis de que el agresor «pudo haber disparado en defensa propia».
Baldemar Trujillo Guerrero, padre de Tatiana Trujillo, asesinada el 19 de abril de 2010, se manifestó en contra de la solicitud del acusado para exhumar el cuerpo de Tatiana porque las muestras de violencia «ya no serán visibles» como cuando en vida autoridades, familia y amistades, nos dimos cuenta de que Tatiana era constantemente agredida.
Dicha solicitud «trata de auto menospreciar el trabajo de la misma autoridad, porque supuestamente ellos hicieron una autopsia» expresó el padre de la víctima.
La familia de Tatiana reiteró que seguirá el caso con el apoyo del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas para evitar que el asesinato de su hija quede impune.
Recordaron que tanto el Ministerio Público de Ocosingo, como el de Palenque, constataron que antes de su muerte, Tatiana había sido golpeada, la autoridad le practicó la autopsia de rigor y concluyó que su muerte había sido provocada por un disparo de arma de fuego calibre 9 milímetros.
Es evidente, dijo, que el ex diputado es el responsable de la muerte de Tatiana en primer lugar por su actitud de huir de la justicia durante varios meses y no dar la cara.
En la reconstrucción de los hechos, se destaca el testimonio de una persona que vio como Élmar Darinel empezó a golpear a su esposa y al huir en busca de ayuda, escuchó el disparo que acabó con su vida.
Tatiana tenía 30 años de edad y era madre de 3 hijos. Sus padres; María Rodríguez y Baldemar Trujillo, son los principales testigos de la vida de violencia que vivió su hija.
A principios de abril pasado, Tatiana llegó a casa de sus padres, huyendo de Élmar, quien la acababa de golpear; sus padres la protegieron. Días después él la convenció con la promesa de cambiar su actitud violenta Tatiana decidió regresar a su casa, donde fue asesinada el 19 de ese mismo mes.
Desde esa fecha Élmar Darinel se fugó, pese a que era el candidato oficial del PRI a una candidatura local en Ocosingo. Tres meses después, tras la constante presión de la familia de Tatiana, la policía lo encontró escondido en la ciudad de México.
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