La directora del Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE), Marta Lamas, se pronunció hoy porque en México se autorice el uso de la píldora abortiva RU486, con el fin de que se garantice el libre ejercicio de las mujeres en su sexualidad y en su determinación a ser madres.
La antropóloga participó en el segundo y último día de actividades del Foro sobre Población, Desarrollo y Salud Sexual y Reproductiva que se llevo a cabo en la Cámara de Diputados, y aseguró que el siglo XXI será el de la píldora abortiva.
Marta Lamas explicó durante su participación, que el funcionamiento de la píldora RU486 provoca la salida del tejido embrionario igual que ocurre en un aborto espontáneo. Afirmó que con el uso de éste medicamento las mujeres tienen acceso a un proceso más simple –casi autónomo– para decidir sobre sus derechos sexuales y reproductivos.
Sostuvo la directora de GIRE que la autorización en México de la píldora abortiva RU486 –que además provocaría una batalla política e ideológica–, contribuiría a enfrentar la escasez de clínicas en zonas rurales en donde las mujeres indígenas mueren por complicaciones en el embarazo, parto y puerperio.
En este foro, añadió Lamas que el uso de la RU486 sería una medida eficaz ante de la llamada «objeción de conciencia», es decir la oposición de los médicos a practicar abortos legales por razones ideológicas.
La activista de GIRE puso ejemplos de reformas legales en países como Francia y España que al despenalizar el aborto, conceden mayor autonomía a las mujeres, en especial a las adolescentes, para decidir sobre sus derechos reproductivos.
Demandó, que el Estado asuma su responsabilidad social de garantizar el cuidado de las y los hijos producto de embarazos no deseados, y el apoyo económico a las mujeres para la manutención de las y los hijos.
La directora de GIRE, expuso que la recién aprobada norma oficial que garantiza la Anticoncepción de Emergencia (AE) contribuye a que las mujeres decidan sobre sus cuerpos, y tengan la posibilidad de evitar el aborto. Sin embargo resaltó que la AE es insuficiente, toda vez que se requieren reformas para homologar las causales del aborto en todo México.
Luego se refirió a las reformas de diciembre pasado en el Distrito Federal (DF) en las que se garantiza a las mujeres el servicio del aborto legal en las instituciones públicas en caso de que un médico se niegue a brindar el servicio por sus creencias ideológicas. Además, obliga a otorgar de manera gratuita las pastillas de anticoncepción de emergencia.
Asimismo, propuso reformar la Ley General de Salud para que se contemplen las necesidades de las y los adolescentes en la salud sexual y reproductiva, y se respete la decisión de las jóvenes a recurrir al aborto legal, aún si los padres se oponen.
Por su parte, la directora general adjunta del Centro Nacional de Equidad y Género y Salud Reproductiva, Raffaela Schiavon, defendió durante su ponencia Estado Actual de la Anticoncepción de Emergencia el uso de la anticoncepción de emergencia, y rechazó que ese procedimiento sea abortivo y atente contra la salud de las mujeres.
La funcionaria federal expuso que con la integración de la AE a la Norma Oficial de Planificación Familiar, se enfatiza el respeto a la libre decisión de las mujeres para optar sobre la maternidad.
Explicó que con el uso adecuado de las píldoras de anticoncepción de emergencia se previenen entre 75 y 85 por ciento de embarazos no deseados; y afirmó que el medicamento debe ser usado cuantas veces sea necesario durante la vida reproductiva de las mujeres.
Schiavon dijo que falta proporcionar mayor información del uso de la AE a las mujeres y a los prestadores de los servicios de salud. Hizo hincapié en que se debe capacitar a éstos últimos en el trato que tienen con las adolescentes que buscan información sobre este método.
Destacó los beneficios de las pastillas de anticoncepción de emergencia y aseguró que se evitarían muchas muertes maternas.
Finalmente, Raffaela Schiavon resaltó la importancia del uso de las pastillas de anticoncepción de emergencia en casos de violación así como también para disminuir el número de abortos mal practicados.
2004/RM/BJ/SM
