La sección australiana de la Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad (WILPF, por sus siglas en inglés) pidió un cese inmediato y total al fuego en el conflicto entre Líbano e Israel de modo que las negociaciones puedan comenzar.
«Nunca podrá haber ?una solución? militar a los problemas que enfrentan Israel y Líbano en la presente situación a través de su frontera común. Sus representantes tienen que reconocer que deben buscar una solución política, negociada y ?hablada», señala un comunicado
WILPF sección Australia considera que sólo los representantes de los pueblos pueden llegar a la mesa de negociaciones. «Nuestro papel como personas u organizaciones que desean actuar en solidaridad es ayudar a los partidos a llegar a la mesa de negociaciones y no intentar hacerlas en su nombre».
Advierte que tomar partido adoptando lemas y declaraciones que llevan implícita la sugerencia de que Israel ó Hezbollah son los culpables exclusivos en el conflicto presente no es útil para asegurar una solución no militar.
El informe indica que los lemas que sugieren a Israel como el principal culpable de la violencia actual, sólo llevan a la idea de que esa nación es beligerante y que la cultura judía sólo se dedica a la guerra.
«Esto tiene un efecto añadido de impulsar un hilo virulento de prejuicios anti-judíos que abunda en la comunidad en general».
En opinión de las mujeres por la Paz y la Libertad, una solución justa es posible a los conflictos entre israelíes, libaneses y palestinos, sólo cuando los representantes de ambos países lleguen a la mesa de negociaciones con el compromiso de alcanzar una vida plena para todos los pueblos implicados.
Por lo anterior, WILPF cree que en el movimiento pacifista se deben adoptar lemas para las reuniones y marchas que tengan el efecto de ayudar a la situación actual a moverse hacia una solución negociada y no militar, pues «los lemas que llevan la culpa y el dolor tienen el efecto contrario.»
En la reciente Conferencia de Roma convocada por la Ministra de Asuntos Exteriores estadounidense, Condolezza Rice y el primer ministro libanés, Fouad Siniora, presentaron un plan de 7 puntos para el cual se logró conseguir el apoyo de Hezbollah, apunta el informe.
«Este plan implica un alto al fuego inmediato y un intercambio de prisioneros entre Líbano e Israel; llama, al gobierno libanés a ejercer la soberanía sobre sus regiones del sur y al Consejo de Seguridad de la ONU para poner las áreas impugnadas de las granjas de Shebaa bajo la jurisdicción de las Naciones Unidas.
Además incluye un amplio papel de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para reactivar el acuerdo armisticio de1949 con Israel.
Finalmente, la Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad, Australia, considera que este plan del gobierno libanés constituye un buen comienzo para negociaciones genuinas entre los países implicados en la guerra actual.
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