La atención del embarazo y del parto por personal capacitado tiene una importancia crítica en la reducción del número de muertes maternas y de diversos padecimientos derivados de la maternidad, informó el Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa) en un comunicado.
La prevención de la mortalidad de las madres y de los recién nacidos requiere que los gobiernos y la comunidad internacional inviertan en la capacitación de recursos humanos para asegurar una atención del parto oportuna, adecuada y de calidad.
A nivel mundial, se estima que 529 mil mujeres pierden la vida cada año a raíz de complicaciones del embarazo o del parto. Entre diez y quince millones de mujeres padecen graves enfermedades o discapacidades derivadas de la maternidad, mismas que pueden curar toda la vida.
En todo el mundo casi un 50 por ciento de las madres primerizas darán a luz solas o atendidas por parientes o personas no capacitadas, lo que pondrá en grave riesgo su vida y su salud.
Las parteras capacitadas han jugado un invaluable papel en la atención del parto en comunidades en las que no se cuenta con fácil acceso a los servicios médicos, además de brindar una atención con sensibilidad cultural y respeto a los derechos de las mujeres.
Evitar las muertes maternas es una condición indispensable para alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio. Para lograr lo anterior es necesario que la comunidad internacional sitúe a la planificación familiar como una prioridad en la agenda para el desarrollo.
La planificación familiar contribuye a evitar los embarazos no deseados y la mortalidad derivada de la práctica del aborto en condiciones de riesgo. Se estima que cada año podría salvarse la vida de 150 mil mujeres si tuvieran acceso a métodos de planificación familiar.
MÉXICO
En México, la razón de mortalidad materna se estimó en 60 por cada 100 mil nacimientos para el año 2006. El 10 por ciento de todos los partos que ocurren en nuestro país son atendidos por parteras, casi el 2 por ciento son atendidos por enfermeras, auxiliares o promotoras de salud, el 86 por ciento por personal médico y poco más del 1 por ciento de los partos es auxiliado por una persona no calificada.
Si se analizan estos datos se observa que las mujeres sin escolaridad son las que más recurren a las parteras (42 por ciento), así las mujeres que viven en el área rural (26 por ciento) y las mujeres con condición de habla de lengua indígena (47 por ciento).
La atención del parto por personal capacitado, con el respaldo de atención obstétrica de emergencia, podría reducir en un 75 por ciento la cantidad de defunciones derivadas de la maternidad. Por ello, es preciso fomentar la capacitación de las parteras y de otros profesionales de la salud para elevar la calidad de la atención del parto.
Además de la capacitación, es igualmente importante la vinculación y respaldo de los servicios de salud en el caso de complicaciones del embarazo y el parto.
Se requiere también contrarrestar la falta de sensibilidad cultural y el trato deficiente o inadecuado, estos factores pueden desalentar a las mujeres al uso los servicios, aun cuando estén disponibles.
Unfpa es una agencia de cooperación internacional para el desarrollo, que promueve el derecho de cada mujer, hombre y niño a disfrutar de una vida sana, con igualdad de oportunidades para todos.
Apoya a los países en la utilización de datos sociodemográficos para la formulación de políticas y programas de reducción de la pobreza, y para asegurar que todo embarazo sea deseado, todos los partos sean seguros, todos los jóvenes estén libres de VIH/SIDA y todas las niñas y mujeres sean tratadas con dignidad y respeto.
El Fondo colabora con los gobiernos y con organismos de la sociedad civil para alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio en aspectos relativos al acceso universal a la salud reproductiva.
07/GG/CV
