En el último año sólo uno por ciento de las mujeres jóvenes demandantes de algún método anticonceptivo han tenido acceso a la primera T de cobre en el mundo (T-380- N), diseñada sobre todo para jóvenes que no han experimentado ningún embarazo (nulíparas) y tienen vida sexual activa.
De acuerdo a cifras proporcionadas por la empresa mexicana diseñadora del dispositivo T-380-N, Implementos Plásticos (Ipsa), en lo que va del año la Secretaría de Salud (Ssa) adquirió 15 mil piezas; cifra insuficiente toda vez que el universo potencial de mujeres jóvenes con necesidad de algún método anticonceptivo asciende a más de seis millones.
A pesar de que el dispositivo fue diseñado por invitación de la Ssa y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), luego de que ambas instituciones concluyeron en 1984 que los efectos colaterales como el sangrado, los cólicos y los calambres en mujeres jóvenes usuarias de la T de cobre estándar (T-380-A) estaban relacionados con su tamaño, el DIU para mujeres nulíparas no representa ninguna opción anticonceptiva en las instituciones de salud de nuestro país.
La T-380-N tiene la misma figura que el dispositivo estándar, la misma cantidad de cobre (380 milímetros cuadrados), es 26 por ciento más pequeño y su peso es 0.11 gramos menor que el dispositivo estándar, todo lo cual disminuye la tasa de expulsión.
Los estudios que sustentan la necesidad de contar con una T de cobre para mujeres cuya cavidad uterina es un centímetro menor que el de una mujer que ha experimentado algún embarazo, son el informe de la doctora Katherine Treiman, del Population Reports, donde señala que más de 100 millones de mujeres en 70 países del mundo utilizan el DIU estándar; pese a que ocasiona rechazo en un considerable porcentaje de usuarias jóvenes, quienes se quejan de abundante sangrado, cólicos y calambres.
De igual forma el estudio de la Universidad de Giorgia en Estados Unidos informa que existe una aplicación indiscriminada de dispositivos estándar en mujeres jóvenes que no han experimentado embarazos, ya que de cada 100 inserciones se registran entre cinco y seis expulsiones durante el primer año.
Según estudios de la Ssa y el IMSS el dispositivo intrauterino para nulíparas muestra una continuidad de hasta 32 por ciento mayor al estándar, disminución que significa en la tasa de expulsión y reducción de la presencia de sangrado, inflamación y dolor hasta en un 99 por ciento.
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