La comunidad lésbico, gay ha quedado fuera de las agendas de los candidatos presidenciales quienes no han presentado una postura clara en torno a sus demandas, consideró hoy Mario Arteaga, presidente de la asociación civil Comité Orgullo México (COMAC).
En entrevista a propósito de la XXVIII Marcha del Orgullo Lésbico, Gay, Bisexual Transexual, Transgénero y Travesti (LGBT) que se realizará el próximo sábado, Arteaga explicó que presentaron un pliego petitorio a los candidatos presidenciales, con las demandas del colectivo, pero la única que respondió fue la candidata Patricia Mercado Castro.
Arteaga lamentó que hasta el momento los candidatos que puntean las encuestas como Andrés Manuel López Obrador y Felipe Calderón Hinojosa, carezcan de una postura clara para esta comunidad, por lo que dijo, seguirán impulsando sus peticiones para que quien gane, «esté consciente de que gobernará para todos los mexicanos».
No obstante, consideró que el candidato que menos oportunidades representa para el colectivo es precisamente Felipe Calderón, del Partido Acción Nacional (PAN) sobre todo porque se ha caracterizado por estar en contra de sus demandas, por lo que dijo, «no podemos esperar algo distinto de este candidato».
Y es que aunque la marcha se desliga de cualquier partido político, sí se les hizo una invitación a participar de forma respetuosa y con la condición de que no se reparta propaganda alusiva del partido y por ahora, dijo, posiblemente participen Alternativa Socialdemócrata Campesina y los partidos de la Coalición.
La marcha en la que participan integrantes del Colectivo lésbico gay del país y sus familiares, partirá a las 11:00 de la mañana del Ángel de la Independencia al Zócalo capitalino.
Este espacio, es una oportunidad para manifestar sus necesidades y los problemas que les aquejan como la discriminación, homofobia y la marginación a la que son sometidos por su preferencia sexual.
Mario Arteaga, organizador de la marcha, comentó que llevan años con las mismas demandas: el combate a la homofobia, sensibilización a los cuerpos policíacos, alto a las detenciones injustificadas y el reconocimiento de sus derechos.
Lamentó que no haya avanzado la Ley de Sociedades de Convivencia, impulsada en 2001 por la entonces diputada local Enoé Uranga Muñoz, que proponía el reconocimiento y la protección civil para la diversidad de uniones afectivas y solidarias que existen «de hecho» bajo los principios de igualdad e inclusión social, establecidos en el sistema jurídico mexicano, entre otros temas.
Consideró urgente contar con una herramienta legal que permita a los transgénero conservar su identidad, su historia académica y profesional ya que lamentó que actualmente éstos tengan que vivir como «indocumentados» en su propio país.
Sobre la educación sexual, dijo que debe ser apegada a conocimiento científico, sin tintes morales y que debe ser impartida desde la educación básica ya que consideró que si no se fomenta una cultura de inclusión y respeto a la diversidad desde la niñez, difícilmente se podrá revertir la homofobia y la discriminación.
Enfatizó que aunque ahora hay más apertura y tolerancia de la sociedad para estos grupos, en comparación con la década de los 70 que es cuando inician las primeras marchas, existe un «desfase» a nivel político.
06/LG/LR
