La Violencia Intrafamiliar, un Drama Cotidiano, es un libro que pretende hacer visible esa violencia que no se ve, que pasa desapercibida para algunas mujeres porque no deja huellas físicas, que es tan imperceptible que parece inexistente y es ignorada por muchas, indicó la autora, Patricia Berumen.
El libro encarna las historias, posee un lenguaje sencillo, accesible, didáctico y contiene un amplio contexto que permite refrescar la memoria, indicó la periodista Sara Lovera, quien participó la noche del miércoles como una de las presentadoras del libro en las oficinas de la Fundación Friedrich Ebert.
Para la directora general de Comunicación e Información de la Mujer (CIMAC), la violencia de género y la intrafamiliar han repuntado a nivel mundial y los medios han ocultado permanentemente el tema.
Naciones Unidas, indicó, ha declarado que el hogar es el lugar mas peligroso para las mujeres y que cada 15 segundos una mujer es agredida.
Por su parte, Bárbara Yllán, subprocuradora de Atención a Víctimas, de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, consideró que el libro es un excelente material didáctico para las mujeres que acuden a la PGJDF pues las historias contadas en él reflejan una situación cotidiana.
Indicó que un aspecto interesante de la obra es el enfoque hacia la juventud pues de acuerdo a los estudios mas recientes es en las relaciones de noviazgo de jóvenes donde se inicia la violencia.
Relaciones de poder, complicidad entre instituciones, familiares, amigos y la sociedad, el miedo y la resignación, son ingredientes esenciales en cada una de las historias relatadas por Berumen.
El libro a decir de Yllán, es una guía sobre lo que no se debe hacer ni reproducir.
En tanto, para Angélica de la Peña, candidata a diputada por el PRD y consejera vocal del Instituto Nacional de las Mujeres, dijo que las historias contadas por Berumen en el libro son el fiel reflejo de lo que pasa en nuestra sociedad.
Las protagonistas de las historias, Lupe, Rosa, Marisol, Ursula, Mónica, Fernanda, Estela y otras más, no fueron educadas desde pequeñas para detectar cuándo un hombre es violento, advirtió.
Ellas, al igual que los personajes de la vida real, creían que la violencia y el amor son inherentes y compatibles y soñaban que con amor y confianza, cambiarían a su pareja.
Sin embargo, apuntó, la realidad es otra y se hace más cruda cuando nos damos cuenta que las mujeres siguen siendo maltratadas en su hogar por la persona que aman, que hace falta especialización de los servidores públicos, que no hay garantías para las mujeres que son víctimas de violencia intrafamiliar y no se les da un trato adecuado.
Indicó que el libro representa una alternativa para que las mujeres que padecen violencia sepan a dónde acudir pues contiene un directorio de lugares que dan atención especializada y felicitó a la autora por su constante interés en el tema.
2003/LGL/MEL
| |
disponible para periodistas y medios de comunicación impresos y electrónicos por favor citen la fuente El servicio informativo se realiza gracias al apoyo |
