La iniciativa para reformar la ley de salud para la población capitalina fue presentada hoy ante el pleno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) por la diputada del Partido del Trabajo (PT), Eugenia Flores, en la que se propone atención gratuita para prevenir y controlar el cáncer cérvico-uterino y mamario.
En su exposición de motivos el día de hoy ante legisladores locales, Eugenia Flores destacó que se castigará la discriminación en servicios de salud por razones de origen étnico, preferencia sexual, posición económica y otras, haciendo énfasis en la erradicación de tales prácticas hacia las mujeres, incluso en el lenguaje.
Al finalizar su presentación, la diputada petista dijo a CIMAC estar optimista por la aprobación de la ley en el primer trimestre del 2003, y por contar con el apoyo de la sociedad civil, de la que espera retroalimentación a través de consultas y foros.
La iniciativa del PT reglamentará el principio de consentimiento informado al que tiene derecho la población. Con ello se prevendría intervenciones injustificadas como ha ocurrido en vasectomías y ligadura de trompas forzadas.
El discurso de la también médica y antropóloga hizo referencias continuas a los derechos sexuales y reproductivos, así como a «la necesidad de dar apoyo decisivo a la prevención y atención de la violencia doméstica y sexual» en la ciudad de México.
Aquí, la tercera ciudad por su población el mundo, 30 por ciento de las capitalinas reportan maltrato y cada año se registran alrededor de 10 mil violaciones.
El documento hace énfasis en los mecanismos para dar cumplimiento de la obligación de las autoridades para interrumpir el embarazo en los casos previstos por la ley, con calidad y oportunidad, contando con personal cuyas creencias no les impidan realizar el procedimiento.
Asimismo, rescata el derecho a contar con alternativas para la atención integral de la salud, por lo que se legislará sobre la certificación a los profesionales de diferentes ramas, incluyendo dentistas, enfermeras, homeópatas, acupunturistas, parteras, osteópatas y hueseros.
Destacó la colaboración de las organizaciones del movimiento amplio de mujeres –del que se considera parte–al mencionar, entre otras, a la Red por la Salud de las Mujeres del Distrito Federal, a Milenio Feminista, Católicas por el Derecho a Decidir, así como asociaciones urbano-populares, de trabajadores sexuales y familiares de presos.
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