Si en 2008 gana la presidencia de los Estados Unidos un o una candidata del Partido Demócrata, llevará a cabo una reforma migratoria durante su primer año de gobierno, prometieron siete de los ocho aspirantes durante el debate que auspició la cadena hispana de televisión Univisión.
Sin embargo, no todos coincidieron con un plan uniforme y sí en cambio, al igual que sus opositores y el actual presidente George Bush, respaldan el muro, las cámaras de vigilancia, el aumento del número de agentes de Patrulla Fronteriza y regular detalladamente una posible vía para alcanzar la ciudadanía.
Según la agencia de noticias AP, Hillary Clinton dijo que estaba a favor de una reforma amplia que implique tener más patrullaje y más tecnología en nuestras dos fronteras.
Barack Obama recordó que era hijo de inmigrantes de Kenia y que siempre ha considerado que toda reforma de inmigración tiene que tener en cuenta aspectos de seguridad en la frontera, un sistema de identificación de empleados y la legalización de los 12 millones de personas indocumentadas que viven y trabajan en Estados Unidos.
Christopher Dodd repitió las respuestas de Obama y Clinton, pero dijo que era necesario también tener en cuenta las razones fundamentales de la inmigración: las pobres condiciones económicas en los países de origen de los inmigrantes.
Indicó que se requieren acuerdos financieros particularmente con México y Centroamérica para mejorar las condiciones económicas de su poblacion generando los empleos que requieren para no venir a buscarlos en Estados Unidos.
La mención a la reforma fue parte de una pregunta sobre por qué si los terroristas que atacaron el 9 de septiembre de 2001 en Estados Unidos ingresaron por Canadá, el Congreso autorizó construir un muro en la frontera con México.
Obama, Clinton y Dodd votaron en favor de la construcción del muro en un tercio de la frontera México-estadounidense como parte de las acciones para detener el flujo de inmigrantes indocumentados hacia Estados Unidos.
El congresista Dennis Kucinich dijo que las naciones deben construir relaciones, no muros y que las actuales políticas en Estados Unidos estaban orientadas a la separación de las personas porque no hay seres humanos ilegales.
Atribuyó la inmigración indocumentada al fracaso del Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos, México y Canadá (TLCAN o NAFTA), y dijo que si llegaba a la presidencia eliminaría ese acuerdo y negociaría otro, obligando a México a ceñirse a patrones laborales de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Bill Richardson, gobernador de Nuevo México, dijo que en el primer año de su gobierno emprendería una reforma de inmigración porque bastaba mirar la Estatua de la Libertad, en Nueva York, para entender que este país simboliza libertad, diversidad y que somos una nación de inmigrantes.
John Edwards dijo que haría una reforma migratoria no solo en su primer año sino en el principio de su gobierno y que ella incluiría un mejor uso de la tecnología para saber quién ingresa a Estados Unidos y una apertura a la ciudadanía.
El ex senador Mike Gravel dijo que hace poco cruzó la frontera hacia Canadá, tomándole solamente unos segundos para pasar, pero estuvo dos horas en la fila para retornar. Entonces, las personas que ingresan a Estados Unidos están siendo tomadas como chivos expiatorios.
Univisión está a la espera de la confirmación para llevar a la pantalla a los candidatos a la presidencia por el Partido Republicano.
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