Al cumplirse 512 años del descubrimiento de América, Amnistía Internacional-Chile manifestó su preocupación por las graves violaciones a los derechos humanos que se siguen cometiendo en el continente americano y en diversas naciones se preparan protestas contra los acuerdos comerciales.
Amnistía Internacional (AI) pidió a los gobiernos de América que se asegure una representación justa de las comunidades indígenas, se promueva el respeto a los derechos económicos, sociales y culturales, el derecho a la vida, a las prácticas ancestrales y a la no discriminación.
Denunció que en Chile, Argentina, Brasil, Canadá, Guatemala, Nicaragua, México, y Estados Unidos, ha aumentado la violación de derechos humanos de las comunidades indígenas, el hostigamiento a mujeres, niños y niñas así como la persecución de líderes indígenas.
Además de que continúan los desplazamientos, expropiación de recursos, daño al ecosistema, tortura, tratos crueles, inhumanos y degradantes.
En ese ámbito, organizaciones sociales de los países andinos comienzan hoy una nueva etapa de protestas contra los Tratados de Libre Comercio (TLC), incluido el ALCA (Acuerdo de Libre Comercio en las Américas), que el gobierno estadounidense trata de imponer en la región.
Las delegaciones de las Campañas contra el TLC y el ALCA de Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia, reunidas en La Paz del 6 al 8 octubre en el III Encuentro Boliviano contra esos acuerdos comerciales, acordaron respaldar y promover iniciativas acordadas en el Foro Social de las Américas de Quito, Ecuador, publica el portal Mujereshoy.
Además del paro programado para hoy en Colombia, se prevén marchas y concentraciones en Bolivia el 11, 15 y 18 de octubre, así como la campaña de referéndum «Ecuador decide», y el lanzamiento de la campaña el 12 de octubre de recolección de firmas para la convocatoria a un Referéndum sobre la firma del TLC en Perú.
En el manifiesto que emana del III Encuentro contra el TLC y el ALCA se denuncia que las negociaciones de esos acuerdos comerciales se realizan a espaldas de la población, de manera poco transparente y bajo las reglas del gobierno de Estados Unidos, que busca garantizar las ganancias de sus empresas y consolidar su dominio geopolítico en la región andina.
Mas de 500 representantes de organizaciones sociales, campesinas, indígenas, de mujeres, derechos humanos, defensores de la cultura, religiosos, organizaciones no gubernamentales de Bolivia, invitados de Brasil, El Salvador, Chile, Estados Unidos, México, Paraguay y Honduras manifestaron que el proyecto de TLC con Estados Unidos busca la mercantilización de los recursos naturales: agua, tierra, minería, gas, fauna, flora y la biodiversidad de la región andina.
Este tratado, dicen las organizaciones, constituye una versión mucho más perversa que el ALCA, pues incluye normas de propiedad intelectual que tienden a limitar el uso de medicamentos genéricos y el patentamiento de plantas y animales.
Destacan que el TLC es un atentado a la seguridad y soberanía alimentaria de los países latinos porque mientras Estados Unidos mantiene su política de subsidios y protección a sus compañías agrícolas, exige la eliminación de la franja de precios de la Comunidad Andina de Naciones (CAN) y promueve la libre comercialización de alimentos y semillas transgénicas.
El gobierno de Estados Unidos chantajea al de Perú y Ecuador amenazándolos con retirarlos de las negociaciones del TLC si no atienden previamente las demandas de indemnización que han planteado más de una decena de empresas estadounidenses, coincidieron los congresistas.
2004/LR/SM
