¿Por qué no todas y todos se pueden beneficiar del mejor descubrimiento del siglo XX? ¿Por qué una herramienta que facilita la vida y contribuye al desarrollo está reservada a las poblaciones urbanas del hemisferio norte? ¿Por qué impedimos que la comunicación llegue a lugares recónditos amparándonos en el regreso de una nueva colonización occidental? ¿Acaso los avances tecnológicos no deberían llegar a todas y todos?
La respuesta a estas cuestiones viene de la mano de la Red de Información y Comunicación TIC que trabaja en distintas áreas en los nueve departamentos de Bolivia, gracias al apoyo del Instituto Internacional de Comunicación y Desarrollo de Holanda (IICD).
Desde 1999 la Red TIC Bolivia es una de las redes más diversas sobre el uso, aplicación y aprovechamiento de las Tecnologías de la Información y Comunicación para el Desarrollo agrupando a 23 instituciones, entre organizaciones no gubernamentales, de base, empresas privadas y entidades estatales que llevan adelante iniciativas que aplican las tecnologías de la información y la comunicación a favor del desarrollo humano.
Según la coordinadora de Comunicación de la Red TIC Bolivia, Claudia Columba Cabezas, el objetivo de esta plataforma es influir en la información y el establecimiento de programas y políticas públicas sobre el uso y aprovechamiento de las TIC en procesos de desarrollo, especialmente en las áreas de educación, agricultura, gobernabilidad y género.
Al mismo tiempo, la red persigue resaltar el trabajo de los miembros que la componen con la implementación de telecentros comunitarios y centros de capacitación, desarrollo de metodologías que impulsan la creación de contenidos locales y la revalorización del recurso humano y los conocimientos locales en la aplicación de las TIC.
La red enfatiza su trabajo a través de una serie de objetivos definidos en tres sectores: el objetivo de gobernabilidad, el rescate de buenas prácticas con la inclusión de las TIC en los sectores más vulnerables de la sociedad: mujeres y organizaciones indígenas y campesinas.
La Red TIC plantea una propuesta de vanguardia desde una visión de desarrollo social que genera la participación de diversas instituciones que trabajan con los grupos más vulnerables del país: niñas, niños, adolescentes, adultos, mujeres y varones con proyectos de desarrollo social, con el fin de formar líderes y protagonistas de su propio desarrollo a través del uso y aplicación efectiva de las TIC.
Por ejemplo, a través del proyecto de servicio de consulta en línea que lleva adelante la Casa de la Mujer, miembro de la Red TIC Bolivia en Santa Cruz, sobre violencia doméstica, ha motivado a las mujeres víctimas a hacer grupos en una red en línea.
La red, totalmente anónima, les permite sentirse más seguras y discutir sus problemas con otras víctimas a través de programas de computadora como skype y correo electrónico.
«Vengo de una familia muy humilde, soy mamá solita de ocho hijos. Soy peinadora de profesión, pero trabajo vendiendo cosméticos y joyas. Tuve un problema que un niño se me enfermó; pago alquiler, no tengo casa propia y con eso me mantengo. En la Casa de la Mujer nos pasan clases, por ejemplo de la autoestima, el maltrato familiar, la violencia.
«Ellos ya nos están incentivando a sentir que nosotras tenemos derechos. Me gustaron los cursos de computación; mire yo no sabía ni agarrar el mouse, entonces yo vi que era una oportunidad aprender computación para nosotras que somos de escasos recursos. Ya puedo mandar mi carta por el correo electrónico, hacer las cartas para cuando necesito en la oficina». (Testimonio de Teresa Cortez Chávez).
Otro miembro de la red es la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (CIDOB). Esta institución lleva adelante una serie de proyectos entre los cuales está el fortalecimiento de las mujeres en temas de toma de decisiones y liderazgo. Desde esta perspectiva, las nuevas tecnologías han incluido las TIC como herramientas claves para su participación.
Así lo constata el testimonio de María Rosario Saravia Paredes de Pando, líder indígena de la CIDOB: «Una de las fortalezas que tenemos es que hermanas guarayas y guaraníes están haciendo sus propias informaciones y a diario se puede ver lo que ellas hacen de acuerdo al tema que tocan. A mi me ha ayudado muchísimo, porque te das cuenta que a través del internet y las nuevas tecnologías podes manejar la información según tu interés.
«Por ejemplo, como dirigente yo necesito estar bien informada; cuando yo necesito algo, esté en Bolivia u otros países, apenas yo subo al internet y ahí verifico y tengo mi información que quiero. Es obligatorio para mí porque como dirigente tengo que saber el tema que estoy hablando, no puedo hablar cosas erróneas».
Los proyectos de TIC aplicados en el sector de gobernabilidad durante ocho años han demostrado impactos elevados, lo que prueba que el uso de las TIC ha contribuido a la promoción de la equidad de género y al empoderamiento de las mujeres, quienes a través de capacitaciones en sus propios lugares han desarrollado capacidades para ejercer sus derechos, además de fortalecer su liderazgo, en beneficio de sus comunidades.
En cuanto al impacto en la agricultura, se ha podido observar que los proyectos han estado orientados a pequeñas, pequeños y medianos productores y productoras de las zonas rurales del país, lo que indica que los proyectos orientan su esfuerzo a favorecer a quienes día a día luchan contra la pobreza y el hambre.
El acceso a la información de precios, de mercados y las capacitaciones contribuye a mejorar la renta de las y los productores con bajos ingresos.
Y es que trabajar brindando tecnologías de la información es muy gratificante. Así lo explica Claudia:
«Puedo mencionar el caso de un joven adulto con capacidades diferentes, no vidente, Rinat Chavarría Hurtado, de 26 años, quien en el marco del Programa de Formación para el Trabajo ?Reforzando el acceso al mundo laboral a través de las TIC?, ejecutado por la organización Fe y Alegría, miembro de la Red TIC Bolivia, ha desarrollado muchas habilidades con las TIC pudiendo actualmente acceder a un trabajo digno».
Dentro del área de gobernabilidad y género nos motiva ver cómo personas y organizaciones de base, que antes difícilmente eran escuchadas, ahora aplican las TIC para que el mundo lea y escuche sus demandas y puedan articular de mejor forma el ejercicio de sus derechos.
En el sector de agricultura nos alienta trabajar con productoras y productores para coadyuvar a la mejora de sus condiciones de vida, usando herramientas de nuevas tecnologías y así introducir avances tecnológicos para que su producción tenga óptimas oportunidades en el mercado.
En educación es gratificante ver a miles de niñas y niños valorar y aprovechar la tecnología, personas adultas que pueden aprender a leer y escribir a través de la alfabetización por radio, y profesores motivados que tienen en sus manos una poderosa herramienta pedagógica: las TIC.
*Periodista y feminista española, especializada en temas relacionados con género e infancia.
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