La Defensoría de la Mujer Indígena (DEMI), de Quetzaltenango, atendió durante 2010 925 casos de guatemaltecas de grupos étnicos; del total, 415 se refirieron a denuncias por violencia de género y por atentados a sus derechos económicos.
Natividad Batz, delegada regional de la DEMI, dijo que aproximadamente fueron 510 casos de asesorías y orientaciones, lo que constituye una sobrecarga de trabajo, aunque necesaria para orientar a las mujeres en cada asunto particular, además de la concientización para la culminación de los procesos, pues a veces por distintas circunstancias ya no quieren continuar.
Explicó que la DEMI ha impulsado una campaña con el propósito de fomentar la cultura de denuncia, ya que desafortunadamente las mujeres en general y en particular las indígenas, regularmente no se atreven a descubrir a sus agresores, por lo que se espera que para este año se conozcan más casos.
Batz informó que durante el 2010 se realizaron varias actividades apoyadas y orientadas con la agenda articulada, el documento específico de los derechos de las mujeres indígenas, las políticas en contra de la discriminación y el racismo y los Objetivos del Milenio.
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