Representantes de 34 países del hemisferio se reunieron a partir de hoy y hasta el viernes en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina para continuar las negociaciones con vistas a la IV Cumbre de las Américas, la cual se realizará en Mar del Plata el 4 y 5 de noviembre.
Se trata de la XL Reunión del Grupo de Revisión de la Implementación de Cumbres (GRIC), en la que Argentina volverá a plantear la visión crítica a las políticas neoliberales de los 90, los subsidios de los países desarrollados y la necesidad de una reforma del sistema financiero multilateral.
El debate girará en torno a las políticas que los jefes de Estado del continente adoptarán respecto a «crear trabajo para enfrentar la pobreza y fortalecer la gobernabilidad democrática», el lema propuesto por Argentina para este nuevo encuentro.
En este marco, la presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) de México, Patricia Espinosa, inauguró en Mar del Plata, ciudad costera ubicada a 500 kilómetros al sur de Buenos Aires, la 38 Reunión de la Mesa Directiva de la Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
La reunión congregó a autoridades de alto nivel de 14 países y de 11 organismos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) encargadas de las políticas y los temas relativos a la situación de las mujeres y la equidad de género en las naciones de la región.
La titular Inmujeres convocó a los funcionarios de primer nivel de la región y de organismos multilaterales a unirse, y explicó que «requerimos un pacto social, político y económico que nos lleve al crecimiento y a la redistribución para darle cohesión social a nuestro continente», según informó en comunicado de prensa.
Espinosa también planteó la necesidad de que las instancias de género formen parte de las misiones que participarán en la próxima Asamblea General de la ONU y afirmó que la propuesta de este pacto responde a la necesidad de que a las mujeres «ya no se nos vea como un sector aparte, como un coto; se debe lograr el reconocimiento de la cohesión social».
Asimismo, dijo que un acuerdo de este tipo logrará que a las mujeres se les deje de ubicar sólo en el ámbito social y se reconozca la importancia de su participación, por ejemplo, en el terreno de la economía.
Al referirse a la Asamblea General de la ONU que se realizará la próxima semana en Nueva York, la funcionaria mexicana fijo su posición en materia de género, sobre todo por la revisión que se hará de las llamadas Metas del Milenio.
«Hago un llamado a los mecanismos nacionales de la mujer a efecto de que formemos parte de las delegaciones oficiales de nuestros gobiernos que participarán en esa sesión plenaria», dijo.
La ONU celebrará del 14 al 16 de septiembre la denominada Cumbre Mundial 2005, donde se evaluarán los avances en el cumplimiento de las ocho Metas del Milenio, las cuales deben ser alcanzadas antes de 2015.
Espinosa tambien recordó que la Cepal, organismo de la ONU con sede en Chile, realizó un gran aporte al plantear la necesidad de velar por la incorporación de una perspectiva de género en la sesión plenaria de las Naciones Unidas.
Finalmente, Espinosa propuso que se sumen indicadores vinculados al derecho humano de las mujeres a vivir una vida sin violencia. «Estos indicadores complementarios tendrían que ser considerados, conjuntamente con las Metas, como compromisos de Estado en nuestros países», afirmó.
05/LM/YT
