Luego del que Partido de la Revolución Democrática (PRD) postulara a una sola mujer como candidata a jefa delegacional, de las 16 delegaciones existentes tras argumentar que fue por voto directo, feministas y académicas consideraron que prevalece la falta de compromiso para respetar las cuotas electorales.
Entrevistadas al término del panel «Las Mujeres en las Transformaciones Políticas de América latina» Patricia Espinosa precisó que hay que hacer una revisión de estas «mínimas exigencias» que son las cuotas electorales, pues si de 16 delegaciones sólo hay una mujer no se cumple con la representación que ellas deben tener.
Sobre el voto directo precisó que sería conveniente pensar para los siguientes procesos electorales, como se tiene que forzar o hacer un candado para que las mujeres no estén solamente en las listas plurinominales, sino también en la elección directa.
La titular del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), hizo un llamado en este sentido a los tres candidatos a la presidencia de la República, para que firmen la agenda de género planteada por el movimiento feminista y el movimiento amplio de mujeres hace un año, que con el nombre de «Un trecho más», se signó el 18 de abril y fue registrada posteriormente ante el Instituto Federal Electoral (IFE).
También hizo un llamado a los grupos feministas ya que no están exigiendo a los candidatos presidenciales su real compromiso con dicha agenda.
Sobre la imputación que el IEDF hace al PRD, Jacqueline Peschard, ex consejera del Instituto Federal Electoral (IFE), hizo notar en entrevista telefónica que hay salvedad en la cuota de candidatos: cuando es elección abierta a la ciudadanía no se puede imponer ganadores.
Para la feminista y catedrática de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) Gloria Careaga, el no cumplir con las cuotas es una violencia importante respecto a los acuerdos y al compromiso existente para el avance de los derechos de las mujeres.
«A pesar de que se supone que es una ley que tienen que cumplir los partidos políticos siempre hay mecanismos a través de los cuales esto no se cumple».
Calificó como una falta de seriedad por parte de los partidos toda vez que los políticos «no están dispuestos a asumir ningún compromiso con las mujeres para que logren avanzar hacia condiciones de equidad.
Epsy Campbell, ex diputada del Partido Acción Ciudadana de Costa Rica, puntualizó que las cuotas deben garantizar que efectivamente las mujeres tengan posibilidad de llegar, ya que en la realidad, éstas se interpretan de manera tal en que aquellos puestos donde no hay posibilidades son dónde están las mujeres y dónde si los hombres.
Para la ex candidata a la presidencia de Costa Rica, «se aplica la cuota de manera formal, pero en la realidad lo que se pretende es romper la estructura de exclusión de las mujeres».
De tal forma que si hay una cantidad de puestos de elección popular lo que tendrían que garantizar los partidos es que ahí estén las mujeres, pero las que pueden llegar no las que podrían, » porque si no, el voto directo se puede convertir en una herramienta en contra de la participación de las mujeres, en lugar de promover la democracia».
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