A cuatro días de que Rosario Robles Berlanga asuma la presidencia nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), vuelve a estar en la mira de la prensa nacional luego de que el periódico Reforma reviviera el pasado lunes la polémica que provocó al demandar el año pasado por difamación al presidente del Grupo Reforma y a una de sus reporteras.
En nota publicada el 8 de abril, el diario mexicano da a conocer que el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés), con sede en Nueva York, incluyó la demanda por difamación que la exjefa de gobierno entablara el pasado 16 de abril contra la reportera Carolina Pavón y el presidente del Grupo Reforma, Alejandro Junco de la Vega, en su Reporte de Ataques a la Prensa en 2001.
Como se recordará, la demanda se debió a un reportaje publicado el 12 de abril de ese año en el que se daba cuenta que faltaba de comprobar casi seis mil millones de pesos del presupuesto público del Gobierno del Distrito Federal, correspondiente al año 2000.
El Comité internacional retomó para sí el caso y el 22 de mayo de 2001 envió una carta de protesta al presidente Vicente Fox donde le dice que Rosario Robles «no rechaza las afirmaciones», aunque dice «que no tenía conocimiento de la presunta irregularidad y por lo tanto no se le debe considerar responsable».
En consecuencia, el CPJ le pedía a Fox que desestimara los cargos contra los demandados, toda vez que «es inaceptable que Robles convierta en una demanda penal sus objeciones a un informe basado en los hechos sobre un tema de evidente interés público».
Consultado por Cimacnoticias, el vocero de campaña de la virtual dirigente nacional del PRD, Ramón Sosamontes, afirmó «que Rosario Robles no desea polemizar sobre un asunto particular que le compete a la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF)».
Cortante, Sosamontes añadió que la demanda por difamación contra Carolina Pavón y Alejandro Junco sigue en pie; a su modo de ver, de ningún modo la reciente información publicada por ese diario «daña la imagen de Rosario», quien asumirá la dirección del Comité Ejecutivo Nacional del sol azteca el próximo domingo.
El vocero perredista sostuvo además que Robles respeta el trabajo de las y los periodistas y que es la PGJDF la entidad encargada de darle una resolución a la demanda por difamación.
Por su parte la reportera Carolina Pavón comentó a cimacnoticias que, a pesar de que el proceso por difamación en su contra y de Junco de la Vega se encuentra detenido, ella se siente «satisfecha y con mucha confianza» para seguir haciendo su trabajo; sobre todo por el apoyo del CPJ y otros organismos internacionales –como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos– o nacionales como la Fraternidad de Reporteros.
Pavón se reservó su derecho a declarar sobre el proceso «siguiendo políticas de la empresa», pero dio a entender que la razón le asiste a la parte demandada ya que en el reportaje nunca se acusó personalmente a Rosario Robles; por el contrario, se cumplió con el deber social de informar con veracidad.
«En todo caso me apego a lo expresado por Alejandro Junco de la Vega, quien advirtió que nuestra obligación informativa es con la sociedad, no importa si hablamos bien o mal de alguna personalidad o gobernante. Eso no nos debe interesar», advirtió.
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