Con el lema «¿Eso no se dice?, ¿eso no se hace?, ¿eso no se toca?», México se sumó la noche de ayer a la campaña por la Convención Interamericana de los Derechos Sexuales y los Derechos Reproductivos, impulsada por el Comité Latinoamericano y del Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer (CLADEM).
En el Claustro de Sor Juana, María Consuelo Mejía, directora de la organización civil Católicas por el Derecho a Decidir, señaló la importancia de mantener los logros obtenidos en las conferencias internacionales de Población y Desarrollo de El Cairo y la Conferencia Internacional de las Mujeres celebrada en Pekín en los años de 1994 y 1995, respectivamente.
Tales cumbres establecieron en el ámbito internacional el reconocimiento de los derechos sexuales y reproductivos de las personas, y se pretende que la Organización de Estados Americanos (OEA) promueva una Convención Interamericana de Derechos Sexuales y Reproductivos que obligue a los gobiernos de la región a respetarlos.
Silvia Pimentel, representante de CLADEM en Brasil, explicó en entrevista aparte con Cimacnoticias que esta convención surge inspirada en otra, la de Belem do Pará, sobre violencia familiar, pues los derechos sexuales y reproductivos son tan importantes como la violencia.
«Así como hay una convención contra la violencia, debe haber una sobre derechos sexuales y derechos reproductivos», enfatiza.
La feminista dijo que no basta con plasmar los derechos en las leyes, sino que es necesario que la sociedad esté organizada y se concientice sobre la importancia de conocerlos para que los pueda ejercer; si no, puntualiza, valen muy poco.
Silvia Pimentel dijo que éste es un trabajo difícil ante el avance de los fundamentalismos, por lo que hay que luchar contra los mitos y prejuicios que existen en torno a la sexualidad. «La sexualidad no sólo es reproducción» , agregó.
Al respecto, la representante de CLADEM explicó que desafortunadamente todavía existe desinterés entre la sociedad hacia estos temas, e indicó que por un lado se continúa reprimiendo a las mujeres, y ejemplifica: «La sexualidad sólo es permitida en el matrimonio, el matrimonio tiene que ser entre heterosexuales, pero esto es un absurdo, la realidad es otra y tenemos que reconocer que actualmente hay parejas diversas».
La convención, continúa Pimentel, busca la no discriminación y el respeto a la diversidad.
Por ahora continuarán presentando la campaña en otros países, y aclaró que aunque CLADEM impulsó este proyecto desde julio de 2001 es un trabajo conjunto de todas las organizaciones civiles que se quieran sumar a ellas.
Como es un proyecto a largo plazo, explica Pimentel, es un buen pretexto para reunir a las mujeres de América Latina y el Caribe para discutir y buscar objetivos comunes y definir conceptos tan importantes como los derechos sexuales y reproductivos.
Actualmente participan en la campaña 23 países de América Latina y el Caribe. Entre las organizaciones mexicanas que se han adherido a esta campaña está: Afluentes, Católicas por el Derecho a Decidir, Coalición de Jóvenes, Equidad de Género, Ciudadanía y Trabajo, Taller Universitario de Derechos Humanos y Red Nacional Democracia y Sexualidad (Demisex), entre otras.
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