El antropólogo Daniel Cazés advirtió hoy que difícilmente se logrará aclarar el feminicidio que tiene lugar en Ciudad Juárez, porque en México las instituciones de procuración de justicia son misóginas.
El director del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades (CEIICH- UNAM) e integrante del Comité Ciudadano de apoyo al Fiscal Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado, exigió a las autoridades dejar de lado su conducta machista y hacer todo lo posible para que no queden impunes los crímenes contra las mujeres.
Lamentó que tendrá que pasar mucho tiempo para que se dé una cambió de mentalidad en las instituciones y en las relaciones entre mujeres y hombres, ya que aún en pleno siglo XXI, prevalece la cultura machista.
Al participar en el panel «Derechos Humanos, perspectiva de género y resolución de conflictos para la convivencia solidaria» dentro del Curso-Taller «Educación para la paz, equidad de género y derechos humanos» organizado por la CDHDF y el Instituto de Desarrollo Social (Indesol), el especialista dijo que «la violencia y la inequidad de género es resultado de la cabronitud estructural de los hombres».
El también Consejero de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal del DF, dijo «la mente masculina, las instituciones y los funcionarios, justifican el feminicidio, por lo que no es castigado.
Por su parte, el psicólogo Antonio Ramírez, autor del Modelo para Erradicar la Violencia Masculina, en California, Estados Unidos opinó que es fundamental que exista la paridad en las relaciones entre hombres y mujeres.
Lo importante, es hacer un análisis de las relaciones humanas porque aún «sin darnos cuenta muchas de nuestras actitudes aceptan relaciones patriarcales o jerarquías.
Al respecto, Francisco Cascón Soriano, integrante del Seminario Educación para la Paz en España comentó que la violencia contra las mujeres vuelve a ser un paradigma central en este tiempo.
Explicó que dentro de los conflictos de género existen tres tipos de violencia: la violencia directa, (la física y psicológica); la violencia cultural, (las costumbres, actitudes y forma de hablar) y la violencia estructural (las instituciones).
Dijo que se deben establecer modelos de cooperación y mediación que permitan encontrar soluciones desde la raíz sin que se favorezca a nadie.
CONDENAN CRIMEN
Los participantes del panel condenaron por otra parte, el crimen cometido contra la doctora Carmen Gutiérrez de Velasco, Mujer del Año 1997, secuestrada el 22 de julio en la colonia jardines de pedregal y quien fue hallada muerta tres días después en Valle de Chalco, Estado de México.
¡Ni una víctima más! ¡Basta de impunidad! Fue el clamor de cerca de 200 personas que realizaron una protesta pacífica y silenciosa en la explanada del Instituto de Enfermedades Respiratorias, para condenar el secuestro y asesinato de la doctora Gutiérrez de Velasco.
Personal de 11 institutos de salud se dieron cita en este nosocomio, frente a una fotografía de la doctora «Carmelita», como era conocida la profesionista nombrada, en 1997, la «Mujer del Año», por su lucha contra el tabaquismo.
La comunidad médica exigió a las autoridades de procuración de justicia y seguridad pública del Distrito Federal, el esclarecimiento inmediato de este lamentable hecho, al tiempo que pidió a las y los diputados federales legislar para contar con penas mayores a secuestradores, con el objetivo de que no vuelva a ocurrir otro caso como el de la directora de la Unidad de Rehabilitación Pulmonar Integral y de la Clínica Contra el Tabaquismo de Médica Sur.
El director de dicho instituto, Jaime Sepúlveda Amor, expresó su solidaridad al presidente de la Fundación Mexicana para la Salud, Manuel Ruiz de Chávez, esposo de la víctima, y a sus dos hijos Manuel y Araceli.
2004/JG/GV/SM
