La negación de la veracidad del testimonio de las mujeres agredidas sexualmente en Atenco por parte de las autoridades, es una forma del machismo del derecho y de las y los aplicadores del sistema jurídico, consideró hoy en entrevista Encarnación Bodelón González, profesora en filosofía del derecho, especializada en temas de derecho y género.
Bodelón González quien visita México como parte de la Comisión Civil Internacional de Observación por los Derechos Humanos y en representación de varias organizaciones de mujeres de España (entre otras la catalana Dones Juristas) preocupadas por los hechos ocurridos en San Salvador Atenco, constató al igual que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), la agresión sexual contra las detenidas en Atenco.
Durante su visita al pueblo de Atenco con la Comisión, este martes, la jurista pudo constatar diversos testimonios de agresiones sexuales, así como el grado de afectación psicológica de las mujeres, característicos en casos de agresiones sexuales y violaciones.
Encarnación Bodelón, consideró que es «muy normal» el que las mujeres no quieran presentar denuncias, toda vez que están bajo los efectos de un «shock postraumático» y no existen las condiciones para que puedan superarlo.
Para la feminista y jurista, impulsora ante el gobierno Catalán de la Ley contra la violencia machista hacia las mujeres, en casos de violencia sexual se requiere un apoyo psico-social hacia las mujeres que han sufrido las violencias, que no se está dando en estos momentos.
En este sentido, indicó que la difusión de noticias respecto de la posible exculpación de los policías implicados en base al supuesto uso de una prueba de poligrafía «detector de mentiras», es insustentable desde el punto de vista neuro-fisiológico, por la baja fiabilidad de sus resultados. En función, dijo, jurídicamente, nunca podría ser considerado una prueba con valor probatoria.
En su opinión, lo que sucede en Atenco «es una muestra más de cómo nuestra cultura patriarcal ha invisibilizado a las mujeres» y tiende a tratarlas negando su autonomía, su dignidad y negando su palabra.
Las agresiones sexuales, dijo, se realizaron con un mismo patrón y al igual que el informe preliminar de la CNDH coincide en que los casos se dan en la misma forma en tiempo y lugar y se evidencia una estrategia de terror no sólo hacia la comunidad de Atenco, sino hacia determinado perfil de mujeres autónomas libres y fue más allá al aseverar que «es un mensaje hacia ellas y hacia otras mujeres en México».
Bodelón González informó que durante la visita de ayer, también se pudieron percatar a través de testimonios de sus familiares, que las mujeres no han tenido una revisión pertinente toda vez que éstas han sido oculares, sin tratamientos para casos de agresiones sexuales y las que han salido de prisión solamente han recibido ayuda de algunas organizaciones de la sociedad civil y el apoyo psicológico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Las secuelas de la violencia extrema ejercida hacia la comunidad de Atenco, dijo la jurista, se pudo constatar en las y los niños quienes están muy temerosos y aún las mismas mujeres de la comunidad que no fueron propiamente agredidas, también presentan shock postraumático y ansiedad.
Finalmente, la profesora hizo un llamado a las organizaciones feministas nacionales e internacionales a sumarse a solidarizarse y apoyar para que cese la violencia contra las mujeres.
06/LG/LR