Las luchas emprendidas por las poblaciones andinas contra los Tratados de Libre Comercio (TLC) han permitido detener las negociaciones de esos acuerdos, sin embargo es necesario continuar en ese sentido y apelar a la solidaridad y el apoyo continental para evitar que la nación estadounidense sea la única beneficiada, sin tomar en cuenta los derechos de las poblaciones de la región y, en especial de mujeres, niñas, niños y las y los ancianos.
Un comunicado de la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo (CLOC), señaló además que el gobierno de Estados Unidos no abandona su estrategia de dominio continental, por lo que ha procedido a buscar los mismos objetivos a través de tratados bilaterales que aunque tienen el mismo contenido básico, llegan incluso a rebasarlo más allá de lo formulado en el ALCA, aprovechando la debilidad y sumisión de los gobiernos de Centroamérica y de los cuatro países de la región andina, con los que adelanta negociaciones.
Según la CLOC, el énfasis del gobierno estadounidense en esta etapa es ratificar los tratados bilaterales con el propósito de consolidar el Plan Puebla Panamá (PPP) y apoderarse del corazón andino del continente, especialmente de la cuenca amazónica, de los recursos de la biodiversidad, de la naturaleza y del medio ambiente, para consolidar el control geopolítico y militar de puntos vitales del hemisferio.
Esta estrategia no sólo está orientada a controlar estas regiones sino a constituirse en una punta de lanza para implantar los TLC y desde allí consolidar la dominación económica, política y militar del imperio en todo el continente.
El gobierno estadounidense en este empeño disputa con la Unión Europea áreas como la del Mercosur y sectores económicos en otros países de la región como el financiero y el de servicios públicos, en los cuales el capital financiero europeo tiene importantes inversiones, apuntó la CLOC.
La Campaña Continental Contra el ALCA, no debe conformarse con el debilitamiento de este acuerdo que se hizo evidente en la reunión ministerial, realizada recientemente en Miami, Estados Unidos, sino que se debe estar conciente de que ahora el peligro aún mayor, pues ataca a los eslabones más débiles, las consecuencias de estos convenios no sólo serán más devastadoras para la soberanía alimentaria, el medio ambiente y los derechos humanos, sino también de dominio político y militar en todo el continente.
La CLOC hizo un llamado a todos los sectores que aún no se han manifestado en esta lucha a que se sumen a las acciones de resistencia que vienen realizando las organizaciones y movimientos sociales en el continente, en la que es indispensable promover una eficaz labor unitaria, acompañada por la más vigorosa movilización y solidaridad entre los pueblos, en contra de dichos pactos comerciales.
2004/GV/SM
