En nuestro país se realizará este año el 17° Congreso Mundial sobre SIDA, con lo cual se convierte en el primer país latinoamericano en ser la sede en la historia de estos congresos.
Sin lugar a dudas, con ello se abre la oportunidad de visibilizar lo que en nuestra región está sucediendo, como el hecho de que el Caribe se ha convertido en la segunda región más afectada por la epidemia del SIDA, después de África Subsahariana.
También es la oportunidad de retomar la reflexión y evaluación de la conferencia en Toronto en el año 2006, donde uno de los focos rojos es haber dejado a un lado, en términos de prevención, a las mujeres.
Esto, dicho por el propio Peter Piot, director de ONUSIDA, quien aseguró que a 25 años de la pandemia, en 2006, hoy no existe ningún país en donde no se haya registrado ya un caso de VIH/SIDA y donde la feminización de la pandemia es innegable.
La pandemia tiene rostro de mujer joven y pobre, pues del total de las nuevas infecciones en el mundo 50 por ciento son de jóvenes y de ellas 70 por ciento son mujeres, informaron en el marco de la Congreso Mundial realizado en Toronto líderes juveniles.
Sin duda la oportunidad que da el Congreso Mundial, que se realizará la primera semana de agosto en nuestro país, va más allá de sólo reconocer las cifras, que ya en 2006 se dieron a conocer por distintas vías, como fue el caso de la lidereza Louisa Binder, cofundadora del Proyecto de Plan de acción sobre mujeres y niñas y el VIH/SIDA, quien recordó las distintas condiciones que colocan en vulnerabilidad a las mujeres en el mundo: un tercio de las ciudadanas del planeta han sido obligadas a tener sexo contra su voluntad.
La mitad de las mujeres en Liberia han sido violadas por un soldado; un tercio de las mujeres que viven en Estados Unidos ha sido agredida por sus parejas; en Canadá las mujeres indígenas tienen tres veces más riesgo de ser agredidas por su pareja actual o anterior.
Las mujeres de entre 24 y 35 años representan 46.6 por ciento del total de las nuevas infecciones.
En México las cosas están por el mismo camino: en el primer semestre del año 2007, 98.7 por ciento de los nuevos casos diagnosticados correspondieron a mujeres, según reportes del Centro Nacional para la Prevención y Control de VIH/SIDA.
Insisto, si se quiere dar sentido real al eslogan que se ha elegido para este nuevo Congreso Mundial «Acción universal ya», los gobiernos deben dar a conocer las acciones concretas de prevención que se están realizando en cada país.
¿Dónde están las campañas de prevención y sensibilización para el uso del condón en nuestro país?
¿Dónde están las acciones claras y puntuales para garantizarle a las mujeres condiciones reales para poder protegerse de las Infecciones de Transmisión Sexual (ITS)?
¿Será que sí se están repartiendo condones femeninos en todos los servicios de salud y dando información suficiente para que las mujeres los usemos? ¿Cuánto del presupuesto asignado este 2008 será realmente destinado a la compra de condones femeninos?
¿Hasta dónde la Coalición de Primeras Damas y Líderes de América Latina, en el marco de la Conferencia Mundial de VIH/SIDA prevista en agosto de 2008, tendrá compromisos claros a favor de sus congéneres?
Esperemos que algunas de las respuesta las vayamos conociendo antes de agosto.
* Periodista y feminista mexicana, Coordinadora General de Comunicación e Información de la Mujer, AC (CIMAC).
08/LL/CV/GG
