La violencia en contra de las mujeres es hoy un tema de la agenda pública nacional e internacional; es asunto de salud pública, de seguridad y justicia, afirmó la presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Patricia Espinosa Torres.
Es además, uno de los fenómenos más devastadores y deshumanizante de nuestra sociedad, porque afecta de manera directa e irreversible la dignidad y la vida de miles de mujeres, niñas, niños y hombres, porque «lo que afecta a las mujeres afecta a los hombres».
Durante la inauguración de la primera «Reunión Internacional sobre Atención y Prevención de Violencia hacia las Mujeres» que inició hoy aquí, la titular de Inmujeres, fue más allá al destacar que la violencia es una enfermedad, una pandemia social con profundas raíces históricas que causa estragos en diferentes niveles: en lo individual, familiar y social.
Al recordar los datos de la Encuesta Nacional sobre la dinámica de las relaciones en los hogares, en el sentido que 47 de cada 100 mexicanas padece algún tipo de violencia (9 millones), convocó a gobiernos, instituciones, medios de comunicación y sociedad en general, a involucrarse en el cambio cultural que se requiere para vivir en un México libre sin violencia.
Asimismo refrendó el compromiso del Consenso de México aprobado el 12 de junio en nuestro país durante la IX Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe el cual dijo, condena las diversas formas de violencia y sus manifestaciones que afectan a las mujeres, a las niñas y adolescentes de la región.
Por su parte, Claudia Hernández Medina, directora del Instituto Poblano de la Mujer (IPM), informó que durante 2003, la entidad atendió a 19 mil mujeres por casos de violencia intrafamiliar. Todas fueron víctimas de violencia psicológica; el 80 por ciento recibieron maltrato físico; 40 por ciento sufrió violencia sexual dentro del matrimonio y poco más de la mitad padeció violencia económica.
Reconoció que pese a los avances que en materia de violencia intrafamiliar hay en el estado, como la Ley sobre la materia, la tipificación de violencia como delito y la creación de una agencia especializada, el problema es evidente.
En la inauguración también participaron Gerardo Laveaga, director del Instituto Nacional de Ciencias Penales (INACIPE) María del Socorro Alfaro de Morales, presidenta del DIF estatal; Blanca Díaz, magistrada de Puebla y la senadora priista Lucero Saldaña.
El encuentro convocado por el INACIPE, Inmujeres y el IPM, concluirá este viernes. En él participarán más de 350 mujeres de varios países quienes discutirán sobre la violencia de género y su impacto social, así como los modelos de atención y prevención contra este flagelo.
2004/LG/GV/SM
