Los presupuestos son relevantes porque determinan la forma en la cual los gobiernos movilizan y asignan los recursos públicos, estos son utilizados para concretar políticas, establecer prioridades y promover los medios para la satisfacción de las necesidades sociales y económicas de las ciudadanas y los ciudadanos.
El proceso de elaboración del presupuesto público es una de las estrategias más exitosas llevadas a cabo a nivel internacional para incorporar la visión de género en la planificación y evaluación gubernamental a fin de hacer real el compromiso de promover el respeto a los derechos de las mujeres y la igualdad entre los sexos.
Los presupuestos realizados con perspectiva de género contemplan las necesidades de mujeres y hombres, su condición y los roles sociales de cada uno, así como los distintos efectos de la distribución o la no distribución que los recursos públicos tienen en cada sector.
Implican la introducción del enfoque de género en todos los programas, proyectos y estrategias de gobierno, además del análisis de la instrumentación y evaluación de las actividades de las dependencias gubernamentales.
Comprenden también la transformación de las condiciones políticas, económicas, sociales y culturales de la mujer mediante la disposición de los medios y recursos suficientes para el efectivo desarrollo de políticas públicas en su beneficio.
Mediante los presupuestos con perspectiva de género se busca erradicar las desigualdades latentes, al distribuir y orientar de la manera correcta y equitativa los recursos.
Su finalidad es analizar cómo el gasto público obstaculiza o impulsa la equidad de género y determina como la asignación del presupuesto afecta de manera positiva o negativa las oportunidades sociales y económicas de mujeres y hombres.
Los presupuestos sensibles al género permiten destinar los recursos económicos necesarios para que el gobierno tenga la capacidad de avanzar hacia la equidad y cumplir las metas económicas y los compromisos sociales.
06/GCJ/CV