El acceso seguro y eficaz a los métodos anticonceptivos es clave para alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), ya que hay una relación entre el control y la salud reproductiva para mejorar las condiciones de vida de las personas, se conoció aquí.
De acuerdo con información del reportaje «Planificación Familiar sin Prejuicios, Los métodos anticonceptivos salvan vidas», elaborado por la Agencia Cerigua y el Fondo de Población de Naciones Unidas, los objetivos están destinados a mejorar la vida de miles de millones de personas que permanecen en la miseria y la anticoncepción es una herramienta para lograr esta meta.
Según el documento, la aplicación adecuada de la planificación familiar permitirá controlar el aumento demográfico poblacional, mejorar la salud y el respeto a lo derechos humanos.
La publicación enfatiza que la población más necesitada de planificación queda de manifiesto en los millones de mujeres que viven en las áreas remotas rurales de Latinoamérica y el Caribe, pues carecen de acceso a los servicios por razones económicas, obstáculos geográficos y transporte para llegar a los centros médicos o a proveedores de servicios.
El descenso de las tasas de fecundidad y de mortalidad genera una mayor proporción de jóvenes que ingresan al mercado laboral con una cantidad menor de familiares a su cargo, subraya el reportaje.
Finalmente, la información subraya que la combinación de planificación demográfica y aplicación de políticas sociales y económicas apropiadas pueden derivar en más capacidad de ahorro y mayores inversiones por hija e hijo.
PLAN PILOTO SOBRE SEXUALIDAD
Sobre el mismo tema, desde San Marcos, Melissa Vega, reporta que el Programa de Salud Sexual y Reproductiva del Área de Salud de San Marcos realizará el Programa de Atención a la Adolescencia en Tejutla, con el objetivo de sensibilizar a estudiantes del nivel básico sobre la vigencia de los derechos sexuales y reproductivos y su sexualidad.
Ninfa Orozco, representante de dicha dependencia, dijo a Cerigua que el programa iniciará como un plan piloto en el municipio de Tejutla, con adolescentes entre los 13 y 15 años, con el fin de prevenir embarazos prematuros, embarazos no deseados, abortos e infecciones de transmisión sexual.
Orozco expresó que la iniciativa fue previamente socializada con las madres y padres, quienes en un principio se negaron a que sus hijas e hijos conocieran la temática a «tan temprana edad», pero finalmente aceptaron para evitar futuros problemas de salud.
Las actividades se llevarán a cabo con la finalidad de contribuir a disminuir las muertes por causas de parto, especialmente en las adolescentes, quienes aún desconocen el funcionamiento de su cuerpo y los cuidados mínimos que se requieren durante esa etapa, añadió la profesional.
En opinión de Orozco, la desinformación o la falta de orientación oportuna son los principales factores que interfieren en la vigencia de los derechos sexuales y reproductivos, especialmente en la adolescencia y la juventud, segmentos poblacionales a los que se les niega el goce de una sexualidad plena.
La experimentación de relaciones sexogenitales en la adolescencia es inevitable, pero se puede minimizar el riesgo de enfermedades, embarazos y la muerte si las y los jóvenes están empoderados, informados y conscientes de los riesgos que enfrentan, pero sobre todo si reciben la información necesaria a tiempo, concluyó la experta en enfermería.
08/MV/GG/CV