La crisis económica por la que atraviesa México, a causa de la recesión que vive Estados Unidos generará mayor desempleo para las mujeres y deteriorará sus condiciones laborales, afirmó la coordinadora de Económica Fiscal y Financiera del Instituto de Investigaciones Económicas (IIE) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Patricia Rodríguez, en contraste con las cifras presentadas ayer por el Instituto Nacional de Geografía Nacional de Estadística Geografía e Informática (INEGI).
De acuerdo con las estimaciones del INEGI, el desempleo aumentó en 4.98 por ciento para las mujeres que viven en las 32 principales ciudades del país y al 5.33 de los hombres.
Sin embargo, la doctora Patricia Rodríguez aseguró ayer en conferencia que en momentos de crisis económica «las mujeres son las más afectadas por el desempleo y enfrentan las peores condiciones de trabajo, a diferencia de los varones».
Asimismo, la especialista refirió que la economía nacional necesita crecer al menos un 5 por ciento y en los últimos años ha crecido 2 ó 3 por ciento, lo que ha generado una tasa de desempleo importante.
Según el INEGI la desocupación abierta afectó 4.25 por ciento de la población, de la cual el 41.3 labora en servicios, el 20.5 por ciento labora en la informalidad, el 15.7 en manufactura, 8 por ciento se dedica a la construcción, 12.9 actividades agropecuarias y el 0.8 minería, electricidad, agua y suministros de gas.
Patricia Rodríguez aseguró que la presente inflación aumenta los costos de los productos básicos, pues de acuerdo con el Consejo de Evaluación de Política de Desarrollo Social (Coneval) de 2007 y 2008 la canasta básica aumentó 12.2 por ciento, lo que representa una baja en el nivel de vida de las y los más pobres en el país.
Al respecto, Alberto Serdán, consultor e investigador del Centro de Análisis Fundar, especialistas en presupuestos públicos, manifestó que el incremento en los costos de los productos básicos para la alimentación afectará a las y los mexicanos que poseen menos recursos, ya que el 10 por ciento de los hogares más pobres en el país destinan 8 de cada 10 pesos de sus ingresos se gasta en alimentos.
El experto informó durante la conferencia sobre la crisis, convocada por la fundación alemana Heinrich Böll, que de 2003 a la fecha se ha registrado en México la inflación en alimentos más alta para los que ganan menos de un salario mínimo o uno «es mucho más grave, porque el salario pierde su poder adquisitivo».
REMESAS DISMINUÍDAS
En 2006, en el 20 por ciento los hogares más pobres 6 de cada 10 pesos provenían de las remesas, las cuales desde agosto pasado a la fecha han disminuido en un 12 por ciento. Esta situación afecta todos los estados de la República, por ejemplo mencionó que el impacto en Chiapas es de un 12.6 por ciento, Hidalgo 12.8 y Oaxaca 7.7.
En tanto, las condiciones laborales para el sector formal e informal van en deterioro, pues un porcentaje importante no cuenta con protección social, ni prestaciones, ni contrato.
Para contrarrestar estos aspectos, el consultor e investigador Alberto Serdán refirió que es importante invertir el gasto social en programas de empleo, salud y educación, principalmente.
INEQUIDAD Y FALTA DE RESULTADOS
De acuerdo al presupuesto federal de este año, las cifras revelaron que funcionarios de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) reciben 956 veces más recursos económicos que el presupuesto destinado a los dictámenes médicos independientes de investigación sobre derechos humanos.
De igual forma, el experto aseguró que programas federales, como Oportunidades, el cual aporta a la economía de poco más de un millón de mexicanas y mexicanos 2 pesos diarios, no ha dado resultados contundentes, pues el impacto es de 3.4 por ciento.
En este sentido el programa Empleo Temporal, que según el investigador de Fundar tenía resultados favorables, desapareció y por último las iniciativas, también de orden federal, Pro Campo y Acerca «no llega a los más pobres», afirmó.
08/GCJ/GG