En América Latina el incremento de contagios de VIH/SIDA se ha presentado concretamente en la población femenina. En el caso de México, la cifra que se presentaba hace 20 años, de una mexicana viviendo con VIH/SIDA por cada 26 hombres, actualmente es de una por cada tres. De esta forma no nos podemos quedar sentadas y esperar a que estas cifras sigan en aumento.
Muchas son las acciones que se pueden llevar a cabo para frenar esta situación. El pasado siete de agosto la AIDS Healthcare Foundation lanzó una campaña en Uganda llamada «Mantente negativo y usa el condón» con el fin de disminuir el número de nuevas infecciones en este país africano.
El tema de esta campaña «Quiérete a ti mismo, a tu pareja y a los condones» se enfoca en repartir condones y pruebas para detectar el VIH/SIDA gratuitamente. Son dos acciones básicas que se deben llevar a cabo y que además son un derecho para todo ser humano. El derecho a la salud lo debemos exigir, porque así como se lleva a cabo esta campaña en Uganda también podría implementarse en México.
En nuestro país necesitamos que toda la población gratuitamente tenga acceso a los condones que previenen esta enfermedad y a este tipo de pruebas que pueden hacerle saber a una persona que la padece, para que reciba tratamiento a tiempo y además no contagie a su pareja: situación que aqueja a las mexicanas debido a que actualmente se ha identificado una vulnerabilidad en las mujeres por su naturaleza biológica, pues las hace susceptibles de fácil contagio, especialmente por sus parejas estables.
Esto se debe a que, según estimaciones de la OMS, en países como Belice, Nicaragua, Panamá y México más de la mitad (57 por ciento) de los casos diagnósticos se deben a relaciones sexuales entre hombres.
Pese a ello, de acuerdo al Fondo de Población de Naciones Unidas, en México la mitad de seropositivos en el mundo pertenecen al género femenino, de esta forma la epidemia del sida se ha feminizado a escala mundial, pues de 1985 cuando comenzaba a propagarse el virus a la fecha el porcentaje de mujeres infectadas pasó de 35 a 48, y en jóvenes de entre 15 y 24 años la cifra de prevalencia en dicho sector se eleva a 60 por ciento.
En México no nos quedamos atrás; de los 182 mil mexicanos infectados que la Organización de las Naciones Unidas tiene registrados, casi una cuarta parte son mujeres.
Y, por si fuera poco, la gran mayoría de las mexicanas que padecen VIH/SIDA son madres, quienes en su mayoría podrían ser infectadas por sus parejas bisexuales; y quienes además de enfrentar esta enfermedad también lo hacen con la discriminación, en muchos casos la pobreza y la imposibilidad de cuidar adecuadamente a sus hijas e hijos.
La OMS estima que en 2007 a nivel mundial, 2.1 millones de personas fallecieron a causa de infecciones de VIH; de las cuales aproximadamente 11 mil muertes tuvieron lugar en nuestro país. De igual manera, estima que 33 millones de personas viven con la infección a nivel internacional, siendo aproximadamente 200 mil las que viven en México.
Diariamente hay contagios y muertes por esta enfermedad, y diariamente científicos trabajan para abatir el SIDA, tal es el caso de un equipo de la Universidad de California en Los Ángeles (Estados Unidos) que ensaya con terapia genética para combatir el virus del VIH-sida y han obtenido grandes avances.
Po otra parte un estudio con 3 mil mujeres reveló que un gel fabricado por la compañía estadunidense Indevus Pharmaceuticals reducía un tercio las tasas de transmisión del virus. Aunque se necesitan más estudios para determinar de manera concluyente si se protegería a las mujeres de la infección con VIH, los resultados de este estudio son alentadores.
Son muy alentadores, sin embargo, este tipo de noticias se quedan en lo efímero porque aun no tenemos la cura y tal vez no la hay porque no lo han permitido para que las farmacéuticas nos sigan vendiendo los medicamentos que tratan esta enfermedad, como lo son antirretrovirales.
Además de invertir en estudios de este tipo para detener esta enfermedad para que en un futuro sólo les contemos a las nuevas generaciones sobre una enfermedad llamada VIH/SIDA que se pudo erradicar gracias a el uso del condón, a la facilitación de pruebas, al suficiente abastecimiento de antirretrovirales y a nuevos descubrimientos que ayudaron a prevenir esta enfermedad; aunque parece algo utópico, yo creo que puede suceder si todos hacemos algo, empezando por utilizar el condón femenino y el masculino.
09/HS/GG
