Ciudad de México.- Tras más de 15 días del paso del huracán John, mujeres y hombres representantes de las comunidades indígenas de la Montaña de Guerrero, solicitan el apoyo de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y a Evelyn Salgado, gobernadora de la entidad, para que atiendan la emergencia que se vive en la zona y exigen un plan de reconstrucción.
“Señora Presidenta Claudia Sheinbaum y gobernadora Evelyn Salgado mi nombre es María Estela Espinoza Aguilar soy de la colonia entre dos ríos del municipio de Tlacoapa. Vengo a representando la voz de las mujeres de Tlacoapa, en donde nosotras como mujeres solicitamos y esperamos su comprensión por ser mujer como nosotras y que nos apoyen ya que por este desastre del huracán John, hemos sufrido mucho como madres de familia por la falta de comunicación y el cierre de carreteras”.
Dijo María con voz contundente y fuerte durante la conferencia. Fue ella misma quien también señaló que las mujeres embarazadas, madres, infantes y personas adultas mayores no tienen forma de alimentar a sus familias porque la comida se echa a perder debido a la falta de electricidad; los caminos se encuentran arruinados y es imposible llegar a lugares céntricos para obtener víveres.
María, como enfermera, también hizo hincapié en que el único hospital de la zona “se cae a pedazos” y no se da abasto para atender la emergencia sanitaria de decenas de personas que requieren tratamiento especializado por lesiones o enfermedad.
“Traigo la voz de las mujeres solicitando el respaldo y la atención de las autoridades para nuestros hijos, para nuestras comunidades. Hay muchas mujeres que quedaron sin hogar, alimento o sin ropa. Muchas perdieron definitivamente todo”.
Mujeres, hombres, niñas y niños de Guerrero desde hace más de 15 días sortean las afectaciones que el huracán John dejó a su paso, pese a que la población indígena y afromexicana es amplia, el día de hoy son la población más ignorada en tema de desastres naturales.
Así lo señalaron alrededor de 60 representantes indígenas de 19 municipios de la montaña alta de Guerrero en una rueda de prensa transmitida a través de las redes sociales de la organización “Tlachinollan, derechos humanos de la montaña” el día de hoy.
Todo el estado se encuentra en una situación crítica, sin embargo, son las y los habitantes de los pueblos indígenas de la Montaña de Guerrero, quienes sufren con mayor fuerza los resultados devastadores y quienes menos apoyo han recibido por parte de las autoridades.
“A pesar de que se acaba de aprobar la reforma constitucional de los pueblos y comunidades indígenas y afroamexicanas y se nos reconoce como sujetos de derecho público, con personalidad jurídica y patrimonio propio, esto solamente escrito en el papel, porque en los hechos seguimos en el olvido histórico”, destacó Martín Rosales, representante de uno de los municipios afectados. “Hemos sido invisibilizados y seguimos de la misma manera. Pareciera que los pueblos y comunidades de la montaña no importamos, como que hay una línea que nos separa entre aquellos que sí importan y los que no importamos”.
De acuerdo con el Censo de Población y Vivienda 2020 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la población total de Guerrero es de 3 millones 540 mil 685 habitantes. Esto representa el 2.8 % de la población total del país.
De este universo, 15.5 % de la población de 3 años y más habla una lengua indígena. Guerrero es una de las entidades federativas con mayor porcentaje de hablantes de lengua indígena, explica el Sistema de Indicadores de Género.
La actual población indígena de este estado es descendiente directa de más de 20 pueblos culturales que habitaron originalmente la entidad. A día de hoy, hay cuatro grandes pueblos indígenas: Nahua, Ñuu Savi (Mixteco), Me’Phaa (Tlapaneco), Ñomndaa (Amuzgo) y el gran pueblo afromexicano, indica el Documento Contexto del Estado de Guerrero.
Un llamado de ayuda desde la Montaña alta
Desde que el huracán tocó tierra el 23 de septiembre, la vida y patrimonio de las y los habitantes de la montaña alta están amenazadas.
“En la montaña donde está la población más pobre y que no tiene ningún ingreso, es la que está realmente olvidada, sin atención y sin una participación”, señaló uno de los representantes más veteranos.
A lo largo de la conferencia, varios representantes de sus municipios tomaron la palabra para dar su punto de vista sobre la situación.
Algunos señalaron que no pueden trabajar porque no existen condiciones adecuadas para hacerlo, la siembra se estropeó por el huracán y como único sustento económico y alimentario, hay una crisis en estos dos rubros.


También expresaron que muchas casas -en su mayoría de adobe y lámina- quedaron destruidas y hay muchas personas viviendo en condiciones deplorables; el cerro se deslava y arruina los caminos; las escuelas se encuentran afectadas y no hay clases y los maestros y maestras tampoco tienen forma de ayudar al alumnado porque no hay medios tecnológicos para hacerlo a la distancia. “Es una situación lamentable”.
La mirada de presidencia sobre el desastre
En la mañanera de la presidenta Claudia Sheinbaum del viernes 4 de octubre, Laura Velázquez, coordinadora de Protección Civil expuso el balance de la situación que se vive en Guerrero.
Durante su participación señaló que el pasado 23 de septiembre el huracán, que tocó tierra como categoría 3, golpeó principalmente a Guerrero en 29 municipios y en la zona costera a 8 más. Durante cuatro días “llovió el 85% de lo que llueve en todo el Estado durante un año”, dijo Velazquez.
Asimismo, la experta explicó que se activó el Plan DN-III, el Plan Marina, Plan Guardia Nacional para atender la situación. También refirió que días antes se realizaron acciones preventivas para ayudar en Acapulco y en los ocho municipios costeros.
“Es muy importante resaltar que del 24 al 28 de septiembre, fueron cuatro días en donde nos abocamos a sacar a la gente que estaba en las zonas de riesgo, a evacuar a la población. Todos, absolutamente, los servidores públicos de los tres niveles de gobierno nos dedicamos única y exclusivamente a evacuar a 10 mil 147 personas. Sedena, Guardia Nacional, Marina, Conagua, el gobierno de Guerrero, Protección Civil, el municipio de Acapulco, Cruz Roja y voluntarios, más de 985 personas con 30 vehículos de los altos y con 40 lanchas pudimos evacuar más de 10 mil personas”, refirió.
De acuerdo con las y los habitantes de la montaña alta de Guerrero, ellas y ellos no recibieron y hasta la fecha no han recibido ningún apoyo de los tres niveles de gobierno.
En el estado el saldo de afectados de acuerdo con Velázquez fue de 270 mil personas; la mitad de ellas en Acapulco, donde las inundaciones cercaron más de 40 mil viviendas. Hasta la mañana del pasado viernes, se registraron 23 decesos. No obstante, tras las declaraciones de habitantes de la montaña de Guerrero, pueden haber muchos más.
Por último, las y los habitantes de la montaña exigieron tres cosas para el bienestar de sus municipios:
“Demandamos primero se incorpore en la declaratoria de desastre a los municipios de la montaña; segundo, que haya una coordinación de las diferentes dependencias federales, sobre todo las que están llamadas a atender los derechos fundamentales de la población, y obviamente tercero, diseñar un plan integral de reconstrucción de los pueblos de la montaña urge esto”, concluyó uno de los representantes.