Ciudad de México.- De la mano de la Secretaría de Mujeres, la Secretaría de Relaciones Exteriores y 35 instituciones del Estado mexicano se instaló la Primera Reunión de Alto Nivel de 2025 de la Comisión de Seguimiento a las Observaciones del Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (Comité CEDAW) para revisar la sustentación del X Informe de México ante este mecanismo, que se llevará a cabo a finales del primer semestre de este año.
De acuerdo con la Secretaría de Mujeres, la ruta de acción hacia la sustentación del X Informe mexicano incluirá diversas reuniones interinstitucionales y encuentros con academia y sociedad civil. De esta manera, el Gobierno de México tendrá que plantear acciones para el compromiso con la igualdad sustantiva.
El X Informe de México ante la CEDAW fue remitido el pasado 27 de septiembre de 2024. En este se destacó los avances como la institucionalización de la perspectiva de género a través de la Política Nacional para la Igualdad entre Mujeres y Hombres; el fortalecimiento de acceso a la justicia para las mujeres junto a la disminución del feminicidio entre 2019 y 2024; la construcción de las bases de un Sistema Nacional de Cuidados; así como la apertura de Casas de la mujer indígena y afromexicana en 17 entidades federativas.
Sin embargo, el panorama descrito en el informe es diferente a la realidad que atraviesan las mexicanas. Pese a que se afirma que las niñas, jóvenes y mujeres son el centro de las políticas públicas y de la política exterior derivado del momento histórico en el que se encuentra México por tener a su primera mujer presidenta, la realidad es que todo se ha quedado en el discurso.
Comenzando con los feminicidios, los datos del Secretariado Ejecutivo indican que, en 2024, hubo 797 presuntas víctimas de feminicidio, pero la cifra podría ser mayor debido a que persisten fallas y omisiones para catalogarlos correctamente y no como homicidios dolosos o incluso suicidios.
Apenas unas semanas atrás, con el cumplimiento de los 100 días de gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, Marcela Figueroa Franco, titular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública mencionó que la violencia feminicida había disminuido 26%. No obstante, el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), contabilizó que de septiembre a noviembre de 2024 se presentó un aumento del 5% de este delito.
Además, siguiendo la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2021, en México, del total de mujeres de 15 años y más, el 70.1% ha experimentado al menos un incidente de violencia que puede ser psicológica, económica, patrimonial, física, sexual o discriminación en al menos un ámbito y ejercida por cualquier persona agresora a lo largo de su vida.
De esta forma, las violencias más experimentadas por las mujeres son en el ámbito comunitario (45.6 %), seguido de la relación de pareja (39.9 %), el ámbito escolar (32.3 %) y, finalmente, el ámbito laboral (27.9 %). No obstante, persisten múltiples formas de agresiones ejercidas contra las mujeres.
Una de las acciones concretas de la actual administración en favor de las mujeres fue la aprobación del paquete legislativo en materia de igualdad sustantiva de las mujeres, una vida libre de violencia, salario igual a trabajo igual y paridad en todos los gabinetes fue la reformación y adición en los artículos 4°, 21°, 41°, 73°, 116°, 122° y 123° de la Constitución Política.
Para la periodista Lucia Lagunes Huerta, aunque es un gran paso para la sociedad mexicana, particularmente para las mujeres y niñas que crecerán en mejores condiciones que sus madres y abuelas; la igualdad no se hace realidad por decretó, sino que se necesita de trabajo, prioridad, operatividad y recursos para que se lleve a cabo y cambie la vida de las mujeres.
La obligación de México ante la CEDAW
En 1945, se reconocieron los derechos de las mujeres a través de la Convención sobre la Eliminación de todas las formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW, por sus siglas en inglés) ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU). México se unió como país firmante el 17 de julio de 1980, por lo que es su obligación como Estado garantizar condiciones para que ellas puedan ejercer sus derechos plenamente.
La CEDAW nació como el primer instrumento internacional amplio sobre los derechos de las mujeres y niñas y es considerada como una Carta Internacional de los Derechos de las Mujeres, la cual se aprobó por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 18 de diciembre de 1979 y entró en vigor hasta el 3 de septiembre de 1981.
Este instrumento no solo lucha contra la discriminación de las mujeres, sino también los derechos de las niñas para preservar su dignidad y bienestar. La ONU define como discriminación contra la mujer
“toda distinción, exclusión o restricción basada en el sexo que tenga por objeto o resultado menoscabar o anular el reconocimiento, goce o ejercicio por la mujer, independientemente de su estado civil, sobre la base de la igualdad del hombre y la mujer, de los derechos humanos y las libertades fundamentales en las esferas política, económica, social, cultural y civil o en cualquier otra esfera”.
Cada estado participante, entre los que se encuentra México, debe condenar la discriminación contra las mujeres en todas sus formas y generar políticas encaminadas a eliminarla en las esferas política, social, económica y cultural para garantizar el ejercicio y goce de los derechos humanos y libertades fundamentales en igualdad de condiciones.
No obstante, aunque se trata del mayor documento jurídico internacional sobre la lucha de las mujeres ante las diversas formas discriminación y México fue uno de los primeros países en sumarse, el panorama nacional dista de las iniciativas planteadas y las violencias contra ellas continua.