Ciudad de México.- De acuerdo con el Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México, durante el primer semestre de 2025, los reportes de pornografía infantil en la capital del país aumentaron 86% en comparación al mismo periodo del año pasado, lo que debería encender las alertas en el país, puesto que el país ostenta el segundo puesto como productor de este material a nivel mundial y el primero en materia de trata de personas.
Cabe señalar que México tiene responsabilidad internacional ante el Protocolo facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño relativo a la venta de niños, la prostitución infantil y la utilización de niños en la pornografía donde debe generar acciones para erradicar la venta de niñas y niños, prostitución infantil y la pornografía infantil. Este mismo protocolo define a la pornografía infantil como:
«Toda representación, por cualquier medio, de niña o niño, dedicado a actividades sexuales explícitas, reales o simuladas, o toda representación de las partes genitales con fines primordialmente sexuales».
Cabe señalar que la violencia sexual ejercida contra niñas, niños y adolescentes es una problemática que pone en vulnerabilidad sus derechos humanos, pues afecta su integridad física, psicológica, y desarrollo integral. De acuerdo con el Balance Anual de REDIM, indica que en 2023 se registraron 9 mil 802 casos de personas de 1 a 17 años atendidas en hospitales por violencia sexual, de las cuales el 92.3% correspondían a mujeres.
REDIM denunció a principios de este 2025 que este tipo de violencia afecta con mayor desproporcionalidad a las niñas y adolescentes, debido a que nos encontramos en un contexto nacional de violencia sexista y adultocentrista. Sin embargo, también hace énfasis en visibilizar los efectos de la violencia sexual ejercida contra los niños, pues a menudo quedan invisibilizados por estigmas.
Siguiendo los reportes sobre trata de personas del Consejo Ciudadano, el 62% corresponde a pornografía infantil, que en realidad se trata de abuso sexual contra infantes. Según declaró Clara Luz Álvarez, secretaria ejecutiva de la institución, la niñez sigue siendo la más afectada por la trata de personas y el modus operandi entre el mundo virtual y físico es distinto, por ejemplo, en el espacio digital los enganchadores son «supuestos» amigos virtuales y en la vida real las víctimas son captadas principalmente por familiares.
El informe del Consejo Ciudadano también revela las desigualdades de género como factores clave dentro de la trata para fines sexuales. Al menos en la Ciudad de México, del 62% de las mujeres víctimas tenían el 39% 18 a 38 años, el 9% de 39 a 59 años y el 2% mujeres de 69 años y más. María Elena Esparza Guevara, consejera en Género del Consejo Ciudadano apuntó que la trata es un delito con énfasis de género ya que las modalidades de trata están directamente ligadas a la cosificación del cuerpo y afectación de la autoestima, lo que es una señal de alerta de Feminicidio Emocional.
Las mujeres son más vulnerables porque generalmente se emplea violencia sexual y de género contra ellas, lo que evidencia que incluso en la trata, hay manifestaciones de machismo y discriminación de género en la ejecución del delito; mientras que los niños son más utilizados en actividades relacionadas con el tráfico, la venta de drogas y acciones violentas.
Recientemente, durante la comparecencia del Estado mexicano ante la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer (CEDAW por sus siglas en ingles), México fue cuestionado sobre las medidas específicas se están tomando para prevenir, investigar y sancionar la trata con fines de explotación sexual.
También se preguntó cuándo se implementará el programa nacional contra la trata para el periodo 2025-2030, y con qué recursos; cómo el Estado mexicano garantizará que las políticas no criminalicen ni limiten la libertad de las víctimas; qué agencias brindan protección internacional; qué programas de reparación integral existen (incluyendo atención psicológica y acceso a derechos); y qué acciones se toman para eliminar la criminalización y estigmatización de mujeres que se prostituyen voluntariamente. Sin embargo, la respuesta del Estado mexicano no respondió dichas preguntas.
Datos del informe señalan que entre enero de 2024 y junio de 2025 se recibieron 5 mil 170 reportes en la Línea Nacional contra la Trata (LNCTP), al hacer el desglose por edad y sexo se encontró que, de las víctimas de pornografía infantil, el 44% tenía entre 16 y 17 años, el 41% entre 12 y 15 años, y el 5% entre 6 y 11 años. Además, el 59% fueron mujeres y el 41% hombres.
Las vías de enganche fueron principalmente a través de plataformas como Facebook (22%), Instagram (18%) y WhatsApp (15%). Las aplicaciones de citas y los juegos en línea también emergen como vías significativas de captación. Aunque en otras modalidades para atrapar a las niñas, niños y adolescentes fueron a través de ofertas de empleo (14%) y promesa de ayuda (9%).
Asimismo, el 38% restante de los reportes de trata de personas presentan ocho modalidades diversas, entre ellas se encuentran: prostitución ajena (43%), trabajo o servicios forzados (31%) y la explotación laboral (12%) los cuales conforman las principales reportadas.
La trata con fines sexuales
La explotación sexual infantil constituye una forma de victimización en la que existe un abuso o agresión y una explotación económica de las imágenes sexuales de una persona menor de edad. De esta manera, una persona abusadora llamada «cliente» logra obtener relaciones sexuales con el menor a través de un intercambio económico. Este fenómeno engloba la prostitución, pornografía, tráfico sexual, turismo sexual y matrimonios forzados como formas de lograr el acceso a las infancias.
De acuerdo con el artículo «Estadísticas cuantitativas y cualitativas para medir el efecto de las nuevas formas de criminalidad violenta contra las mujeres: los delitos en materia de trata de mujeres, niñas y adolescentes y sus vínculos con la delincuencia armada» de la abogada feminista Teresa C. Ulloa Ziáurriz, la trata de personas y sus formas de esclavitud y explotación sexual son el segundo negocio ilícito más lucrativo a nivel mundial.
El diagnóstico «Agenda integral de política pública: Acceso a la justicia reparación del daño y restitución de derechos de las personas sobrevivientes a la trata de personas con fines de explotación sexual», indica que se desconoce la cifra exacta del número de víctimas de trata, ya que esta práctica ha operado desde la clandestinidad y normalización.
Algunas estimaciones muestran la existencia de 49.6 millones de personas que viven en estas condiciones: 30% se encuentran en América Latina y el Caribe, y alrededor de 270 mil en México. Además, son mayoritariamente las mujeres y menores de 18 años quienes quedan atrapadas bajo este sistema: 65% de las víctimas son mujeres y 35% hombres.