Las niñas y los niños de 2 a 12 años son los más propensos a sufrir abuso sexual y en el caso de las y los adolescentes sucede con mayor frecuencia entre los 16 y 19 años, señaló la doctora Selene Sams Soto, médica ginecóloga del Instituto Nacional de Pediatría, durante el simposio de «Abuso sexual en niños y adolescentes», realizado en dicha institución.
La doctora Selene Sams comentó que el abuso sexual infantil no respeta raza, género ni condición social, y se comprende como actos de exhibicionismo, caricias, contacto físico genital, orogenital, manipulación, introducción de objetos, penetración vaginal o rectal.
En el Distrito Federal existe un promedio de 350 denuncias mensuales de delitos sexuales en donde la mitad de las víctimas son menores de edad y en más de 60 por ciento son menores de 20 años, destacó la doctora Sams con datos obtenidos de Internet.
La doctora Sams enfatizó que en la mayoría de las denuncias predominan las víctimas del sexo femenino, en donde el 90 por ciento de los abusos son cometidos por varones. Y en donde el 90 por ciento de los ultrajes sexuales, las victimas conocen al agresor, que es, en la mitad de los casos, un familiar. Por lo regular la violación tiene lugar en el mismo domicilio.
ATENCIÓN PROFESIONAL
Selene Sams explicó que la exploración ginecológica a una menor de edad posible víctima de abuso debe llevarse a cabo de manera detallada y rigurosa, por las implicaciones legales que conlleva. Ésta debe realizarse dentro de las primeras 72 horas posteriores al presunto abuso.
Sams puntualizó que durante el escrutinio no se deben introducir objetos, ni se debe forzar a la niña o niño, se les debe dar atención psicológica adecuada y los exámenes clínicos tienen que efectuarse en presencia de la mamá y una enfermera.
«La violación es un suceso que las niñas y los niños no comprenden a cabalidad, que a la vez altera las estructuras sociales y familiares» finalizó la doctora.
POSIBLES CAUSALES
Según la doctora Corina García Piña, el abuso hacia las niñas, niños y adolescentes tiene relación con la condición de las madres, pues las niñas y los niños son más propensos a sufrir una violación cuando la mamá tiene tendencias depresivas, dependencia económica, varias parejas emocionales o ausencias prolongadas en el hogar.
Corina García señaló que, según datos clínicos, el abuso sexual infantil tiene que ver con el consumo de drogas, alcohol y sexualidad temprana en los varones.
07/NSA/GG